Los habitantes de la comunidad El Tamarindo, cantón San Diego, del municipio de San Carlos, departamento de Morazán, tendrán que esperar un poco más para poder contar con agua potable, y aun cuando el alcalde Walter Romero asegura que ya presentó toda la documentación solicitada por la Dirección de Obras Municipales (DOM) el proyecto aún no ha sido adjudicado.
El joven edil califica la reducción del FODES y el tener que depender de la DOM como la pérdida de la autonomía municipal.
“Prácticamente acá nos han quitado la autonomía de los gobiernos municipales ahora las cosas van a llegar al municipio cuando ellos quieran, en el momento que ellos quieran y de la manera que ellos quieran. La población exige, la población demanda, la población ha confiado en uno, pero uno no puede hacer nada al respecto”, recalcó el alcalde Walter Romero.
Otros dos proyectos se encuentran en similares condiciones, estos son: construcción de un centro cultural, que estaría ubicado donde está la Casa Comunal y está ocupada por la PNC, y la intervención de una calle principal en colonia Santa Bárbara.
Para el joven alcalde de 28 años, que se inicia como funcionario público bajo la bandera de GANA, la experiencia no ha sido la más gratificante hasta la fecha, ya que la alcaldía de San Carlos dejó de percibir $70,000 mensuales y actualmente, con el 1.5 de FODES, el monto mensual entregado es de $14,000.
A esa cantidad se suma lo que ingresa a la comuna, un promedio de $2,000 por servicios o pagos de impuestos municipales.
“Si nosotros hubiésemos tenido un poquito más de recursos, mayor disponibilidad financiera, creo que hubiésemos hecho ya mucho más de lo que hemos hecho con la falta de FODES, pero a estas alturas solo estamos viéndola pasar, intentado ir sobreviviendo dando los servicios que como alcaldía se brindan”, lamentó el alcalde de San Carlos.
En septiembre del 2021, el concejo municipal de San Carlos realizó un préstamo por un 1,800,000 dólares, destinados para: dos casas comunales, una obra de paso, la adquisición de un inmueble para la municipalidad, pretenden desarrollar un proyecto de agua potable para beneficiar a la población del casco urbano, barrio La Paz y caserío El Foco.
“Gracias a Dios que logramos refinanciar ese crédito y con ello vamos a solventar muchas necesidades dentro del municipio, la necesidad más grande que tenemos es el tema de agua; traemos el agua desde Chilanga, son 18 kilómetros que el agua viene por gravedad, con ello logramos mantener al 60% de la población”, explicó Romero.