Al menos sesenta negocios ubicados entre la cuadra del barrio El Convento y una área del mercado municipal en Santa Rosa de Lima, La Unión, son afectados por el colapso de las tuberías de aguas negras que está generando malos olores y poniendo en riesgo la salud de los vendedores y peatones de la zona, según aseguraron los lugareños.
De acuerdo con los vendedores, la alcaldía manda hacer las reparaciones y a los dos o tres meses vuelve a dañarse; es un problema que vienen enfrentando desde hace más de diez años.
Se trata del colapso de las tuberías que llevan el agua al pozo resumidero de todas las aguas sucias que salen de las viviendas del casco urbano, entre ellas de los servicios sanitarios.
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José Alberto Canales, administrador del mercado municipal, manifestó que se hicieron las coordinaciones con la gerencia de la alcaldía para éste fin de semana iniciar con la limpieza de las tuberías, aunque no es una responsabilidad de la comuna en hacerlo, sino de la Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados (ANDA).
Desde el 2018 se viene dando los problemas de la obstrucción de las tuberías por la poca capacidad que tienen de captación, es muy delgada y con alguna basura que la gente tira en los tragantes rápido se obstruye provocando el derrame de las aguas negras, aseguró el administrador.
“En vista de que Anda no manda a repararlas, nosotros como municipalidad siempre hemos tomado a bien limpiar las tuberías para evitar que el agua se derrame provocando malos olores afectando a las personas y también afectando la calle porque es una zona con mucho tráfico vehicular”, indicó Canales.
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Rosa Canales afirma: “esto apesta a heces y orines, aquí caminamos muchas personas que venimos a comprar al lugar, los carros cuando pasan no tienen cuidado nos mojan con esas aguas sucias es urgente que las autoridades se preocupen por resolver definitivamente ese problema”.
“Nosotros los vendedores aquí pasamos atendiendo a nuestros clientes y comiendo frente a ese mal olor que apesta de esas aguas sucias que están saliendo, eso nos afecta a los que vendemos comida”, agregó Victorina Rubio.
Victorina, tiene una pequeña venta de bebidas embotelladas y también prepara jugos naturales, está ubicada en la esquina enfrente de las aguas estancadas, asegura que tienen temor a enfermarse por esa suciedad.