La Ley especial para la regulación y control de las actividades relativas a la pirotecnia, en el artículo 39, establece que las alcaldías remitirán al Cuerpo de Bomberos los primeros quince días del mes de octubre el listado de lugares propuestos para la venta colectiva de productos pirotécnicos, los que serán calificados mediante inspección conjunta con la División de Armas y Explosivos y un delegado municipal. Pero a la fecha, nadie sabe nada de esas gestiones ni de las autorizaciones.
De acuerdo con fuentes de la estación de Bomberos de La Unión, hasta la fecha ninguna de las alcaldías les ha enviado la propuesta de los posibles sitios para hacer las inspecciones. Y así determinar si esos lugares cuenta o no con las condiciones para instalar a los vendedores de pólvora.
Alexander Quintanilla, jefe de los bomberos de La Unión, dijo que referente a la organización de las ventas de los pirotécnicos, son siete municipios donde se instalan los puestos: La Unión, San Alejo, Pasaquina, Intipucá, Santa Rosa de Lima, Anamorós y Polorós.
Quintanilla manifestó que en La Unión están atrasados con los tiempos porque ningún alcalde les han enviado las propuestas de los lugares, pero junto con la gobernadora y la Comisión de Protección Civil están agilizando para hacer algunos trámites de ley, con el objetivo que a fin de año no hayan personas quemadas.
“Son los alcaldes los que deben mandar la propuestas de dos lugares, somos nosotros con la policía los que hacemos las inspecciones para ver que se cumplan con las medidas, entre ellas que no hayan fuentes de incendios a 20 metros donde se instalan, aislados de ventas de comedores”, agregó Quintanilla.
Incertidumbre
Los vendedores de estos productos aseguran que por nueve años se han instalado en la 7ª calle Poniente, frente al complejo educativo José Pantoja Hijo, en la ciudad de La Unión. En los años anteriores, a partir del 15 de noviembre ya comenzaban a armar los puestos provisionales.
Los comerciantes sostiene que las demoras se deben a la falta de comunicación y de acuerdos de los funcionarios de las alcaldías con los bomberos.
Ángela Artola tiene 25 años de vender pólvora y dice que desconocer lo que sucede con el alcalde de La Unión, y porqué no les han cedido la calle donde han colocado sus negocios en años anteriores.
“Nosotros ya hicimos los créditos para comprar la pólvora, son deudas desde los 25 a 35 mil dólares, ya se compró ese producto y no lo podemos regresar. A estas alturas algunos de los vendedores ya nos hemos instalados y otros en armar los puestos”, externó Artola.
Carmen Quinteros, otra de las vendedoras, reiteró la necesidad de trabajar, y que lo único que quieren es que se les autorice en la misma cuadra de los últimos años. “Nosotros ya instalados cumplimos con todas las medidas de seguridad que nos dan en las charlas, pero los del CAM tienen represalias con nosotros”, sostuvo .
En esa cuadra del centro de La Unión donde ponían las ventas, está una de las entradas al mercadito de mariscos, las oficinas del Cuerpo de Agentes Municipales (CAM) y la estación de bomberos.
El sargento Josías Mejía, subdirector del CAM de La Unión, manifestó que están a la espera de las reuniones previas que se tienen antes de que se instalen las ventas de los productos pirotécnicos.
“La propuesta de nosotros es que se asigne otro sector como la Cuarta Avenida, para que los bomberos tengan la calle como la principal como reacción inmediata de salida para sus emergencias, pero al final quienes deciden son el alcalde y el departamento de Catastro”, agregó.
En el 2021 ocurrió un incidente en la noche, mientras un agente municipal descansaba debajo de un toldo en el interior del mercadito de mariscos. Les lanzaron dos morteros que explotaron sobre esas estructura. Y en esa misma área habían dos cilindros de gas de uno de los comedores del lugar.
Algunos agentes indicaron que con ese informe es suficiente para dar por hecho que en esa cuadra donde quieren instalarse de nuevo los vendedores, no cumple con los requisitos que exige la ley.