El caficultor Ever Leonel Díaz Pérez, de 38 años, quien el año pasado se agenció el primer lugar del concurso Taza a la Excelencia al mejor café salvadoreño falleció, según información colgada por la Asociación Cafetalera de El Salvador (ACAFESAL) en su página de Facebook.
Según trascendió el deceso de Díaz Pérez se produjo este sábado tras batallar con una enfermedad, algo que ha causado consternación. Le sobreviven su esposa Norelvia Elías de Díaz y tres hijos pequeños: Josué, Mileydi y Heydi.
La Junta de Gobierno y las Juntas Departamentales de ACAFESAL , a través de una esquela, está entre quienes mostraron el pesar y las condolencias a la familia del caficultor, quien estaba a cargo de la Finca Mileydi, ubicada en El Tunel, La Palma, departamento de Chalantenango y en donde junto a su familia ha producido café variedad Pacamara.
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Las personas que conocieron de cerca su historia consideran que se ha perdido una mente maestra en el campo de la caficultura.
Según distintas publicaciones especializadas, el caficultor Díaz Pérez tenía 17 años en el esfuerzo de la producción del grano y señalan que su dedicación, entrega y visión lo llevó a posicionar su café como el mejor de El Salvador generado con un proceso natural, orgánico.
“Mi padre era ganadero. Yo era joven y decidí que me dedicaría al café. Fui de los primeros que empecé a sembrar en La Palma. Cuando comencé no sabía nada. Yo solo sembré variedades porque los palos eran grandes, ¡y vaya sorpresa! Ahora la finca es una de las que produce el mejor café”, comentó Ever con gran satisfacción, durante la visita que en el marco de un reportaje le hizo una fotoperiodista de El Diario de Hoy.
La propiedad del caficultor tiene más de 10 hectáreas de extensión a 1,300 metros de altura. En esta finca se pueden ver cultivos de no solo de la variedad Pacamara, sino también Pacas y Geisha y es justamente su alta calidad lo que lo ha llevado a exportar café a países como Estados Unidos, Rusia, Australia, Japón y Singapur.
El café producido por Díaz Perez se caracteriza posee notas de panela, meolcotòn y frutos tropicales, como mandarina y maracuyá.
De hecho el año en que este emprendedor se coronó ganador del certamen Taza a la Excelencia de El Salvador, patrocinado por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, tuvo la oportunidad de participar en una subasta internacional en la que su producto obtuvo la más alta puntuación y el mejor precio por libra, superando a cafés mexicanos, nicaragüenses, costarricenses, guatemaltecos e incluso colombianos.
