¿Es posible acabar con la obesidad aplicando una inyección? Reino Unido aprobó el uso de un nuevo fármaco para reducir hasta un 12% del peso total del paciente a través de varias sesiones y el cual solo es viable en determinados niveles de obesidad.
Es importante recordar que la obesidad no es solo un problema estético debido a que pone en riesgo la vida de los pacientes al desarrollar problemas cardiacos, accidente cerebrovascular o problemas renales. El Instituto Nacional para la Excelencia en Salud y Atención británico (NICE, por sus siglas en inglés) aprobó el uso de semaglutida, en adultos que presentan al menos una afección relacionada con el peso y un índice de masa corporal (IMC) de 35.

Las personas solo recibirán semaglutida bajo receta médica y se podrá aplicar en pacientes con presión arterial alta, dislipidemia, apnea obstructiva del sueño y enfermedades cardíacas.
A través de los ensayos los especialistas han demostrado que los pacientes pierden más peso y en menos tiempo siguiendo un proceso de aplicación del fármaco, pero manteniendo una rutina de entrenamiento supervisado. Un informe presentado en 2019 estimó que el 28% de los adultos en Inglaterra eran obesos mientras el 36% tenía sobrepeso.
La información brindada a través de la cadena ITV señala que el medicamento estará disponible en agosto de este año. Helen Knight, directora del programa en el centro de evaluación de tecnología de la salud en NICE, dijo a los medios que el sobrepeso y la obesidad son grandes desafíos para el sistema de salud tomando en cuenta que “es una condición de por vida que necesita intervención médica, tiene efectos psicológicos y físicos y puede afectar la calidad de vida”.