Sesenta millones de dólares del presupuesto de Educación fueron “reorientados” al ministerio de Obras Públicas (MOP) y a la Dirección de Obras Municipales (DOM) “para remodelación de escuelas”, se ha informado oficialmente.
Al principio se informó que le fueron recortados por la Asamblea al presupuesto de Educación, con el argumento de que eran para “cumplir compromisos de Hacienda”. Sin embargo, tras los cuestionamientos que se desataron, se dijo que “no es cierto que haya habido un recorte de fondos” a Educación, sino que serán “reorientados”.
Aunque han tratado de justificarse diciendo que dicha reconstrucción se le asignará a los “especialistas” en esas obras y por eso se les transferirán los fondos, esto se vuelve todavía más incierto en el momento en que no se sabe de avances en la remodelación de 5,150 escuelas que el régimen prometió hacer en cinco años, a razón de 1,000 por año, proyecto para el cual había $400 millones provenientes de fondos propios y otra parte de créditos del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
Si no se concreta la reconstrucción de escuelas como se ha argumentado para justificar la transferencia, el paso dado por el régimen sería un golpe a la formación de los salvadoreños, como lo que se ha querido hacer con el INSAFORP al intentar desmembrarlo y disponer de su presupuesto que en gran medida sale de las aportaciones de la empresa privada. No está claro si los contribuyentes de tan valiosa iniciativa seguirán aportando recursos, pero siempre queda el riesgo de que las empresas y negocios que corten sus aportes sean amenazadas con “inspecciones fiscales”, multas “por incumplimiento de deberes” o lo que se les venga en la cabeza, ya que toda la gente en nuestro suelo está muy al tanto de lo que sucede en los centros de tortura “oficiales”.
Sólo hay que ver la denuncia que hizo la familia de Alejandro Muyshondt, que hasta hace poco fue asesor de seguridad nacional del régimen y que de un día a otro fue apresado. Su familia reporta que no le permiten verlo y sus vestimentas estaban manchadas de sangre, lo que sucede con frecuencia cuando las soldadescas capturan a una persona.
Familias y comunidades encaran la necesidad de educar niños
Toca ahora a las familias, las comunidades, pueblos y ciudades organizarse para educar a sus niños y jóvenes, al igual que continuar la capacitación de adultos, una tarea que ahora deben asumir los productores.
El más efectivo control para asegurar la convivencia y la buena marcha de una nación son jóvenes y adultos de toda edad educados.
Para el investigador educativo, doctor Oscar Picardo, cualquier decisión en el sistema educativo salvadoreño debe considerar más o menos: 5,179 escuelas, 1,276,010 estudiantes de los niveles básicos, 189,117 estudiantes del nivel superior, 46,277 docentes en servicio, 41 instituciones de educación superior, 8,842 docentes universitarios, entre muchos otros datos importantes (otras cifras que necesitaba para el análisis están en reserva).
Según el especialista, 6 de cada 10 estudiantes abandonan antes de llegar al nivel medio, es decir, solo 4 terminan bachillerato; luego, sólo 2 ingresan a la universidad y sólo 1 se gradúa, ahí está claramente el resultado: un 60% de la población condenada a vivir con menos del salario mínimo; un 20% que podrá lograr un nivel de vida de supervivencia; y un 10% que ingresará a un club privilegiado de oportunidades, efectivamente sólo 1 de cada 10…
“Una cosa son las visiones utópicas, las irresponsables promesas de campaña, las aspiraciones, los anhelos, las mentiras de los políticos o las exigencias de las gremiales, y otra muy distinta es la factibilidad y la realidad”, reflexionó.