Por todos los comercios de la gran San Salvador y de las demás zonas comerciales del país se respira ya un aire navideño, un ambiente de luces, arbolitos y adornos que simbolizan la Navidad (o nacimiento del Niño Jesús). Es un espíritu navideño que palpita en el corazón de cada salvadoreño.
Las vitrinas se ven llenas de juguetes, desde los más sencillos a los más ingeniosos. Los almacenes exhiben toda clase de mercadería, desde calzado, trajes, cosméticos y los más finos perfumes.
Ya es Navidad en las calles de la gran ciudad, y también en las cabeceras departamentales y demás pueblos.
Y los niños ven con sus ojos alegres, a través de las vitrinas, el juguete que le han pedido al Niño Dios o a Santa Claus, para que se los lleve el 24 de diciembre a las doce de la noche.
Ya es Navidad en los centros comerciales. Es alegría, y en los espíritus hay optimismo. Algunos clientes comienzan a hacer sus compras con anticipación, o hasta que reciban su aguinaldo (o aguilando). Tiendas y almacenes exhiben sus aparatos más modernos conforme a la tecnología digital: celulares inteligentes, tabletas sofisticadas, pantallas enormes, en las que se ven por cable, bellísimos paisajes multicolores, de fauna silvestre o flora de las especies florales más hermosas.
Y en la Plaza El Salvador del Mundo una pastelería exhibe el árbol navideño más alto del país, adornado con luces multicolores y otros bellos adornos.
El espíritu navideño, pues, se estremece de entusiasmo y alegría. Como que nos sentimos más hermanados en la época navideña. Y así debe ser, porque el Niño Jesús vino al mundo a enseñar paz, amor, hermandad y solidaridad.
En los hogares ya hay árboles navideños adornados con lucecitas de colores, guirnaldas y esferas de todo color anunciando la Navidad o Natividad.
En otras casas, en las cabeceras departamentales hay ya graciosos nacimientos con figuritas de barro. De vendedoras de frutas, pastores, el pesebre donde nació el Niño Dios, rodeado de la mula, el buey y San José y la Virgen María .También en el nacimiento hay espejos que asemejan lagos o lagunas. Todo un esplendor navideño.
Como un estímulo navideño a todos los lectores de este gran Diario, permítaseme el siguiente saludo navideño de mi inspiración:
Hablemos con Dios
“Hablar con Dios es simplemente hablar con la v ida…” (Carlos Balaguer. EDH. 17 de noviembre de 2023).
Hablemos siempre con Dios, porque hablar con Dios “es hablar con el mundo que nos circunda, con las aves y con las demás formas de vida de la creación virtual de Dios. Es aprender a hablar consigo mismo, con los seres que amas, con árboles seres y montañas”.
“Es hablar con el Padre y las estrellas. Es abrir las puertas de lo invisible y lo visible. Orar es, además, invocar a tu ángel, fortalecer tu alma y conocer la verdad interior”.
Frases éstas, tan llenas de amor, de fortaleza y de encanto, que nutren el alma y alimentan el espíritu. Pero a veces la deterioran, hasta hacerla caer vertiginosamente en la sima de los peores antivalores.
Hablemos con Dios para enriquecer nuestro espíritu, y pidámosle de hinojos que nos dé salud, bienestar y felicidad, que nos proteja y proteja a nuestra familia, a nuestros, hijos, esposas, padres y abuelos.
Comunicarse con Él es llenarse de alegría, de satisfacción y de contento, porque Él siempre nos abre su corazón que palpita paz, amor y buena voluntad.
Digámosle: “Dios mío, Todopoderoso, te pido, por la paz de nuestro pueblo, por la paz del mundo. Que no nos falte el pan de cada día. Que siempre tengamos trabajo, en el cual podamos desempeñarnos con eficiencia y capacidad”.
“Padre celestial: aléjame de todo mal pensamiento, de toda vanidad, de la envidia, el rencor y de cualquier otro antivalor que aniquile mis buenas ideas y pensamiento positivos”.
“Dios omnipotente: que no haya corrupción en la conducta de quienes nos gobiernan, de quienes forman parte del Estado, de los funcionarios que están en el poder”.
“Hablar con Dios es, al final, encontrarte a solas con Él. Es calmar las aguas de tu fuente íntima, aspirar profundo el aire, buscar el centro de tu ser (situarte mentalmente sobre una gran esfera que es el planeta y luego sentirte suspendido en un lugar del vacío universal, sintiendo que eres el centro del Universo”).
“Luego, abrir las ventanas de tu corazón y hablarles al Padre y al Cósmico. Y les des el nombre y la forma que sea. Si lo haces con la inspiración del amor, Dios te escucha y luego te responde. En la vida real, porque Él es real como tus más preciados e invisibles anhelos. Vivamos, entonces, el prodigio de hablar con Dios y con la v ida”, concluye el poeta, escritor, moralista y músico Carlos Balaguer.
Estimados lectores: hablemos siempre con Dios, al acostarnos, al levantarnos y siempre que sintamos la necesidad de comunicarnos con Él. ¡Sí, señores!
FELIZ NAVIDAD
Fe, amor y hermandad para todos nosotros,
Ejemplo de solidaridad debemos ser siempre,
La bondad, la fe y el altruismo practiquemos,
Iluminemos el espíritu con luces celestiales,
*Zunzunes vuelen sobre nuestros jardines.
Níveas perlas formen un collar para nosotros
Amigos, todos debemos cultivar la amistad,
Vivamos en paz entre los unos y los otros,
Ideas positivas siempre forjémonos en la mente,
Dios, la Virgen y el niño nos acompañen siempre.
Animémonos siempre a seguir adelante,
Dirijamos la mirada hacia el Cielo, en oración.
*Zunzunes son una especie de colibrí que habita en la isla de Cuba.
Maestro, sicólogo, gramático.