Son de los peores vicios del alma y del espíritu, como el egoísmo, la gula, la ira y la lujuria, que entorpecen la razón de los seres humanos, hasta convertirlos en despreciables, perversos y malvados.
Mientras que la virtud del amor lo perdona todo, lo endulza todo, lo suaviza todo.
Lo perdona todo porque olvida las ofensas; lo suaviza todo porque lima asperezas; y lo endulza todo porque dulcifica las amarguras.
Veamos lo que acerca del amor dice el psiquiatra, director del Centro español, doctor Enrique Rojas en su libro “Amor inteligente”: “El ser humano siempre quiere más . Por eso el conocimiento de lo que es amor lo va llevando hacia lo mejor. Tira, empuja y se ve arrastrado por su belleza. El amor es lo más importante de la vida, su principal guion. Lo expresaría de forma más rotunda: Yo necesito alguien para compartir mi existencia. El amor es extender el Yo hacia el Tú, para formar un Nosotros. Queda asimilada la otra persona. Por eso enamorarse es enajenarse, hacerse ajeno, formar una unidad más espaciosa y profunda. El amor auténtico hace a la persona más completa”.
Y ahora veamos lo que el psicoanalista húngaro-argentino, doctor Béla Székeli escribió acerca del amor en su “Diccionario enciclopédico de la PSIQUÉ: “ 1. Amarás a ti mismo como a tu prójimo (Biblia). ‘Magna res est amor’(‘El amor es una gran cosa’ –Kempis: ‘Imitatio Christi’). (‘Ama et fac quod vis’) ‘Ama y haz lo que quieras’- San Agustín. 2. “La felicidad suprema… no consiste en que dos seres se digan íntimamente queremos vivir uno por el otro, sino que esta promesa signifique en sus pensamientos: queremos vivir juntos para algo” (Albert Schweitzer)”. Y continúa el doctor Béla Székely toda una página completa definiendo el concepto del amor.
Ahora veamos otras definiciones del amor vertidas por sabios famosos:
Virgilio: “El amor triunfa en todo”.
Paul Auguez: “Amor es el intercambio de dos fantasías y el contacto de dos egoísmos”.
Concepción arenal: “El amor vive más de lo que da que de lo que recibe”.
Rubén Darío: “Cuando el hombre ama de veras, su pasión lo penetra todo y es capaz de traspasar la tierra”.
Dante: “Amor y corazón gentil son una cosa misma”.
Abate Ricard: “Una joven de diecisiete años se deja amar; una mujer de treinta se hace amar”.
Paul de Kock: “A los dieciocho años, se adora; a los veinte, se ama; a los treinta y seis, se desea; a los cuarenta, se reflexiona”.
Amemos, pues, amemos sin condición, amemos a todos.
Además, amando nos despojamos de todo vicio que pueda perjudicar nuestra salud.
San Martín de Porres
San Martín de Porres Velázquez Lima. Nació el 9 de diciembre en Luma, capital del Perú, y falleció el 3 de noviembre en Lima el 3 de noviembre de 1639 en Lima , a los 59 años de edad.
De nombre secular San Martín de Porres Velásquez, fue un fraile conocido en el virreinato del Perú de la orden de los dominicos.
Fue conocido también como el santo de la escoba, por ser representado con una escoba en mano, como símbolo de su humildad
Hay un retrato de él cerca del siglo XVII en la iglesia monástica de Santa Rosa de Lima, retrato to que fue pintado durante su vida muy poco después de su muerte, probablemente el más fiel a su apariencia.
Se encuentra en la basílica y convento de Santo Domingo.
Su humildad nos recuerda a la humildad de Jesús de Nazaret. Era tan milagroso que hasta practicaba la levitación. Fue un mulato católico que desempeñó varios oficios, entre ellos el de peluquero.
Amaba a los animales y hacía que los ratones comieran con un gato en el mismo plato.
Decía que los animales son hijos de Dios y por eso había que cuidarlos, desde los pájaros, las arañas, hasta las mariposas, aún los alacranes, los murciélagos, los escorpiones y los animales de los ríos, de los lagos
y del mar, desde los peces más chicos hasta las enormes ballenas.
Hacía obras de cardad principalmente a los pobres, y decía que los ricos debían de repartir parte de su riqueza a la gente más pobre.
Era un santo realmente extraordinario.
Como fue tan caritativo, ahora veamos lo que famosos pensadores han dicho acerca de la caridad:
Jacques de Lille: “La caridad que sólo se insinúa por medio de limosna, es un medio de conservar la miseria”.
P. Vitoria: “La caridad es amor, y sólo en el amor se puede ejercitar”.
René Descartes: “La caridad cubre con un velo los efectos de los hombres”.
Publio Ciro: “Socorre doblemente al necesitado, quien da de prisa”.
Lacordaire: “Comparte con los pobres los beneficios de la vida, he aquí la verdadera señal de amor: quien no lo haga así, no ama”.
Napoleón Bonaparte: “El gran milagro de Jesucristo es, sin contradicción, el reinado de la caridad”.
Miguel de Cervantes Saavedra: “No hay mejor bolsa que la caridad”.
Corneille:
“La manera de dar vale más que lo que se da”.
Y en los proverbios de la Biblia está el que dice: “El que ejercita la caridad es para vida, mas quien persigue el mal, para su muerte”.
Seamos caritativos, pues, hagamos caridad, y así Dios nos va a bendecir. ¡Sí, señores!
Maestro, sicólogo, gramático