Se ha acordado disolver la Dirección General de Estadísticas y Censos (DYGESTIC), para delegar las competencias de esta al Banco Central de Reserva de El Salvador, para que este último se encargue de las tareas que la DYGESTIC viene por competencia de ley desarrollando, como por ejemplo, las estadísticas sociales y económicas incluyendo censos poblaciones en el país, datos de gran trascendencia para la toma de decisiones de país.
La DYGESTIC nace un 5 de noviembre de 1881, con el nombre de Oficina Central de Estadística. SE crea así el organismo que se responsabilizaría a nivel nacional de la investigación y generación de información estadística del país. Conforme ha ido avanzando el tiempo, esta dependencia que actualmente forma parte del Ministerio de Economía, ha ido desarrollando a través de censos, abordajes en lo referente a temas como la densidad poblacional, siendo la principal fuente de datos demográficos debido al gran volumen de información que se maneja, brindando una fotografía de la población, describiendo la misma desde un enfoque científico y cuantitativo,
El trabajo de la DYGESTIC, como lo demanda la naturaleza de la misma, brinda diversas ventajas como la estratificación de la información para la obtención de datos pequeños, generan puntos de referencia para el desarrollo de estadísticas a posterior y viene a brindar un procedimiento que ayuda a evaluar fenómenos con frecuencias mínimas que en otras fuentes informativas difícilmente podrán ser identificados. En el operativo censal de la DYGESTIC, se logra ir más allá de las intuiciones, robusteciéndose la toma de decisiones para el diseño e implementación de políticas públicas que aborden y solventen las necesidades del país.
Por lo tanto, el impacto que genera la Dirección General de Estadísticas y Censos es sumamente relevante y trascendental, por lo que es menester el que se pueda mantener y robustecer esta entidad, de tal forma que se apoye en la capacitación constante de su recurso humano para la obtención de resultados mas certeros, reales y transparentes que sean indicadores para ejecutar acciones que brinden respuestas a los desafíos que un país debe enfrentar.
No solamente se debe tratar de ver una entidad que se encarga de elaborar y facilitar encuestas a diestra y siniestra, se busca trascender en la recolección de datos que posteriormente deben ser debidamente analizados, como fuente de información demográfica y socioeconómica que facilite la elaboración de los indicadores para el desarrollo, diseño de estimaciones lo suficientemente robustas para atender temas de interés social como la natalidad, mortalidad, migración, crecimiento poblacional, alza de bienes de consumo cotidiano (canasta básica), entre otras proyecciones derivadas.
Una entidad que tenga la tarea de realizar investigaciones para la recolección de datos y elaboración de estadísticas debe mantenerse dentro de la estructura orgánica del Estado, siendo de vital importancia fortalecerla con recursos, brindándole autonomía y salvaguardando que los datos generados provengan de fuentes fidedignas, de tal forma que no sean tergiversados o manipulados, para poder tomar decisiones que provengan de hechos reales y ciertos, no de situaciones que emanen de ambigüedades que puedan generar un percance a la población en general, ayudando a que todos/as como parte de un Estado, podamos tomar las mejores decisiones para la mejora continua y la sostenibilidad en el tiempo.
Abogado, Master en Tributación Internacional y Asesoría Jurídica de Empresas, Decano de la Universidad Nueva San Salvador