Recientemente el panorama nacional se ha sobrecargado de una serie de sucesos que hacen que muchas personas dejen de lado algunos aspectos que son importantes para el futuro de El Salvador. Esto no quiere decir que lo que ha sucedido con la FESFUT no sea importante o que la cuarta prórroga del Régimen de Excepción deba pasar inadvertida; al contrario, no debemos quitar el dedo del renglón. Sin embargo, el oficialismo se aprovecha de ello para diluir en medio de la conversación pública las jugadas más agudas que están tramando. Y en esta serie televisiva de color cyan que vivimos a diario en este país se avecina una nueva temporada, una en la que van tras nuestras pensiones.
Es importante tener presente que la crisis política de este país actualmente concurre sobre dos aspectos fundamentales: el problema fiscal y el de seguridad pública. El oficialismo se ha encargado de que su maquinaria de propaganda bombardee a la ciudadanía solo con el de seguridad, encapsulando esa problemática en una narrativa que habla de “guerra contra las pandillas”. Históricamente, la propaganda de guerra siempre ha resultado efectiva para maquillar problemas económicos y enaltecer la figura de quien encabeza el discurso de guerra, dos pájaros derivados con un solo tiro, el problema es que esta guerra también la está sufriendo y pagando gente inocente con su sangre. La vida de muchos inocentes ya se desvaneció a consecuencia de las ambiciones que emanan desde la Casa Presidencial. Mientras tanto, la problemática fiscal pasa inadvertida, pero la inflación y la posibilidad de que el gobierno salvadoreño caiga en default hacen que sus planes económicos se estrechen cada vez más para dirigirse hacia el mismo lugar. El Sistema de Pensiones.
El 10 de julio salió a la luz una investigación periodística del periódico digital El Faro, para la cual tuvieron acceso a un documento del Ministerio de Hacienda en el que se plantean tres escenarios de parte del gobierno para lidiar con el problema fiscal. Llegar a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), Reformar el Sistema de Pensiones y la búsqueda de “nuevas fuentes” de financiamiento. De estos tres escenarios el más complicado es el acuerdo con el FMI, debido a que ha puesto una serie de condiciones que el gobierno salvadoreño debería cumplir: estas condiciones exigen una gran armonía democrática. Esto último dificulta aún más una posible negociación. La de nuevas fuentes de financiamientos expone dos cosas: la primera es que no será suficiente, los recortes serán inminentes, y la tercera opción (pensiones) debe darse, y el segundo aspecto expuesto es que el Bitcoin y los Bonos Volcán han sido un fracaso rotundo. ¿Entonces qué queda? Solo una agresiva reforma al Sistema de Pensiones.
Ya de por sí, entender la temática de las pensiones es bastante complicado. Por ello, comparto tres aspectos que son fundamentales para entender lo que está por venir. Hago la aclaración de que mi comprensión sobre el tema es más política que económica. También, he tratado de simplificar lo más posible los conceptos.
1- Tasa de Reemplazo (TR): este es el porcentaje de nuestro último salario que pasará a convertirse en nuestra pensión. En decir, la TR es la cantidad de la pensión a recibir.
2- Sistema de Capitalización Individual: esta es nuestra cuenta de ahorro individual; lo que tenemos con las AFPs. Nuestra pensión dependerá de cuánto hayamos ahorrado dentro de este sistema. Si la TR sube dentro de este sistema, la pensión no cubrirá toda nuestra vejez.
3- Sistema de Reparto: este sistema depende de un fondo común y no de los ahorros individuales; de ese fondo se pagan las pensiones de todas las personas. Si la TR sube mucho, el fondo se puede agotar y es ahí donde el Estado debe reponer dicho fondo. ¿Cómo? Con más impuestos.
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De momento y como es de costumbre para este gobierno, no hay información pública que nos diga qué tipo de reforma quieren ejecutar. Pero es importante tener información básica a la mano para comprender mejor este escenario y que no nos agarren por sorpresa. Ellos nos someten a una constante Doctrina del Shock, con sus guerras contra las pandillas, el secuestro del fútbol y sus abusos de poder. Las pensiones son el futuro más palpable para las siguientes generaciones de jubilados, es injusto que nos las quieran arrebatar solo para montar la siguiente temporada del espectáculo del autócrata que dirige este circo improvisado.
Comunicólogo y político