Similar a las misteriosas esfinges de la mitología egipcia, se apostaba en su estudio de pintura y en las vueltas de la vida a proponer -con su usual sonrisa fraterna- enigmas del arte maya, la magia y la clarividencia, a quienes pasaran por allá. Pedro Portillo -“primer y último hippie” de la paz- que se apaga como una estrella entre las sombras de la historia de su tierra natal. Pintor del sueño maya, actor, estudioso, intérprete y clarividente del Tarot de los dioses egipcios: “El-Barajas” (Tabla de Esmeralda o tábula esmeraldina). Fue un artista multifacético que dejó sus huellas en nuestra cultura y en quienes le conocimos y apreciamos fraternalmente. Fue un viajero e incansable admirador de la Guatemala Antigua y Eterna, con sus templos de piedra; sus indios maizales; sus volcanes de fuego; sus montañas azules; sus calles de basalto, mirra e historia; su Cristo blanco resucitador y sus ventanas floridas... Fue de los seres que al desaparecer ante nuestros ojos -como en un sueño eterno- se sumergen en el cosmos infinito de perdurable memoria. ¡Buen viaje amigo y no olvides volver por las calles de tu antigua “Guate” de montes azules! Aunque sea en el sueño de tus ojos cerrados a este mundo fugaz.