Los ingresos del gobierno central crecieron en un 20.4% en los primeros siete meses de 2022, lo que equivale a que ha recibido $616.19 millones más en comparación del mismo periodo de 2021, según datos del Banco Central de Reserva (BCR).
De enero a julio de este año, el gobierno ha recaudado un total de $3,636.82 millones solo en concepto del Impuesto Sobre la Renta (ISR) y del Impuesto al Valor Agregado (IVA), cuando en 2021 fueron $3,020.63 millones.
De los $7,967.7 millones que equivale el Presupuesto General de la Nación 2022, la administración de Nayib Bukele proyectó $6,205 millones en ingresos en impuestos y otros rubros, meta que economistas señalan que debe cumplir para compensar los gastos proyectados.
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Solo en concepto de IVA, el ingreso que ha obtenido el gobierno central de enero a julio de este año es de $1,782.59 millones, es decir, $195.37 millones más que el lapso de 2021 cuando fueron $1,587.22 millones, de acuerdo con las cifras obtenidas en el portal web del BCR.
Respecto al Impuesto sobre la Renta (ISR) en siete meses de este año, el Ejecutivo ha obtenido en ese concepto $1,854.23 millones, lo que equivale a un saldo de $420.82 millones más que el reportado en el mismo plazo de 2021 que fueron $1,433.41 millones.
Abril de cada año, que es cuando los contribuyentes presentan la declaración de la renta, el ISR tiende a sobrepasar los montos recaudados versus el resto de meses del año.
El alza de precios de productos y servicios que ha golpeado el bolsillo de los salvadoreños sigue imparable en el país. De hecho, la inflación ha pasado de 7.42% en julio a 7.7% a agosto, panorama que economistas han manifestado favorece la recaudación del IVA al Estado, pero que podría generar menor consumo de la ciudadanía ante el aumento de costos.
¿Se cumplirán proyecciones?
Expertos hicieron énfasis en que el gobierno debe alcanzar las proyecciones en ingresos tributarios que estableció en el presupuesto 2022 para cumplir con sus obligaciones de gastos.
Sin embargo, el economista José Luis Magaña advirtió sobre la brecha no financiada que el Ejecutivo incluyó en el presupuesto de este año.
“Según el presupuesto aprobado, la meta de incremento de la recaudación del ISR es de $469.9 millones y de IVA de $387.2 millones. Es decir que, para cubrir el presupuesto programado, el gobierno necesita una recaudación de $857.1 millones mayor que en 2021 en IVA y Renta. Y aún logrando esa meta de recaudación había una brecha no financiada de $498 millones”, planteó Magaña.
Datos del Portal de Transparencia Fiscal del Ministerio de Hacienda destacan que a agosto de 2022 se han excedido las proyecciones de recaudación respecto al mismo periodo de 2021.
De esa manera, en ocho meses de este año en concepto de IVA han ingresado a las arcas del Estado un total de $2,054.5, lo que equivale a $71.3 millones más a lo presupuestado para ese lapso de 2022 que era $1,983.2.
Mientras, en relación al ISR correspondiente a la misma fecha se han obtenido $2,077.8 millones, que equivalen a $213.5 millones más que lo estipulado en el plan de gasto que era de $1,864.3 millones.
“Parece ser de que para los primeros meses del año la recaudación se ha superado un poco lo programado en el presupuesto, pero como a medida la actividad económica tiende a desacelerarse un poco, entonces la recaudación también se debilita poco a poco”, explicó Rommel Rodríguez, coordinador del Área de Macroeconomía de la Fundación Nacional para el Desarrollo (Funde).
Rodríguez se refirió a que aún faltan algunos meses para que culmine este 2022 “y la tendencia es que de mediados del año para adelante la recaudación pueda verse afectada por la desaceleración de la economía, pero también es por el compromiso de gasto que hay”.
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Sostenimiento de medidas
Alejandro Zelaya, ministro de Hacienda, ha atribuido que el buen desempeño de los ingresos fiscales ha contribuido a que el gobierno pueda cubrir compromisos y al sostenimiento de las medidas antiiflacionarias que aplican desde marzo pasado. Solo mantener el subsidio de los combustibles hasta octubre ha asegurado que abarcará un costo de unos $360 millones.
El funcionario atribuye el buen desempeño de la recaudación en parte al plan anti evasión que desarrollan.
Zelaya ha sostenido que “el país mantiene la capacidad de hacerle frente a sus compromisos fiscales”, pese a que agencias calificadoras y el propio Fondo Monetario Internacional (FMI) han señalado que el fuerte aumento de la deuda externa y el alto gasto público son dos de los aspectos que más presión han agregado a las finanzas.
Para Rodríguez “en términos de política es que a pesar de que caiga la recaudación y caiga considerablemente”, cree que el gobierno “va a tener siempre como horizontes, como principios, sostener estos programas que buscan palear el impacto de la inflación en la economía salvadoreña. ¿Por qué? Porque le están generando réditos políticos”.