Ante el anuncio que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) aprobó un préstamo por $100 millones para el gobierno de El Salvador para el programa “Protección Social Responsiva a Choques en El Salvador”, algunos políticos de oposición señalan que es importante que se conozcan los indicadores para la ejecución de dicho préstamo, con el fin de verificar que los fondos no se utilicen para campaña con fines electorales.
De acuerdo a la información divulgada por el BID, el programa incluye la entrega de transferencias monetarias temporales y el fortalecimiento de la oferta de Desarrollo Infantil Temprano para los hogares beneficiados. En total, la operación se destinaría a 170,000 hogares “afectados por eventos adversos”.
Para garantizar que no se utilice para obtener réditos electorales en 2024, Andy Failer, presidente de Nuestro Tiempo, considera que el gobierno tendría que rendir de cuentas de los fondos y divulgar los indicadores del programa.
“Solo quedan dos cosas, la primera es la rendición de cuentas ante la ciudadanía, que es inexistente, no hay garantías del buen manejo de los fondos públicos. Y la segunda son los indicadores del programa que se ejecutará y que deben compartirse con el BID, pero esto probablemente lo harán después de elecciones”,
Andy Failer, presidente de Nuestro Tiempo
Dados los componentes de transferencias monetarias, no descarta que pueda ocurrir algo similar con la entrega de paquetes alimenticios del Programa de Emergencia Sanitaria (PES) en 2021, cuando hubo denuncias que fueron utilizados en la campaña de las elecciones legislativas y municipales a favor de Nuevas Ideas.
“No sorprendería para nada que esa sea la finalidad. Este gobierno ha fracasado en la gestión económica y frente al panorama electoral necesitan algo con que limpiarse la cara, si el préstamo del BID incluye transferencias monetarias a hogares, estamos frente a la estrategia del PES 2.0”, expresó.
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César Reyes, diputado de la Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), también considera que existen pocas garantías que se haga un uso correcto de los fondos ante la falta de transparencia y sea para campaña para las elecciones 2024.
“Más parece que será una campaña asistencialista con fines electorales. Al gobierno le interesa tener a los salvadoreños sumidos en esta crisis económica, para que dependan de la ayuda del gobierno y esta ayuda transformarla en votos”,
César Reyes, diputado de ARENA
La información divulgada por el BID indica que para las transferencias se daría prioridad a hogares liderados por mujeres, hogares con niños menores de ocho años, hogares con personas con discapacidad y hogares con personas mayores de 70 años.
De igual forma, Anabel Belloso, diputada del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), sostiene que se requiere mayor transparencia de parte del gobierno en el uso de los fondos.
“Tendría que conocerse cómo se implementará ese programa de transferencias. Por los plazos también habría que verificar cuándo le empiezan a desembolsar”,
Anabel Belloso, diputada del FMLN
La diputada califica de “irresponsable” que el gobierno busque más endeudamiento para financiar programas y proyectos. “Sin hacer esfuerzos reales, no solo cosméticos, de ordenamiento de las finanzas públicas”, añadió.
Y agregó que se debe rendir cuentas de la ejecución de otros préstamos externos que se aprobaron para atención de la primera infancia.
Con el nuevo crédito se pretende financiar el equipamiento de 47 Centros de Bienestar Infantil (CBI), el desarrollo de guías pedagógicas del currículo nacional de primera infancia y la capacitación de personal de atención directa de los 187 CBI.
Para concretar el préstamo, el gobierno necesita la autorización de la Asamblea Legislativa para firmar el contrato de préstamo y luego ratificarlo.