En su informe de tercer año de gobierno, el presidente Nayib Bukele brindó un discurso basado en su campaña mediática sobre la aplicación del régimen de excepción. Lejos quedaron de sus palabras las medidas económicas que piensa desarrollar para enfrentar el alto costo de la vida, derivado por factores internos y externos, según analistas económicos.
El desempleo, los problemas fiscales por el alto endeudamiento, la migración, las pensiones y el combate a la corrupción, fueron áreas intocables en su discurso.
Las críticas de la oposición y de expertos en economía denotaron la falta de compromiso del presidente Bukele en aclarar a la ciudadanía qué hará para evitar que el precio de los alimentos de la canasta básica no sigan subiendo.
Jorge Villacorta, analista político, señaló que el gobernante se enfocó en una de las situaciones que le ha generado aceptación por parte de la ciudadanía y que mediáticamente le ha favorecido.
Enalteció “la guerra” que ha emprendido en contra de las pandillas, la cual, asegura está por ganar, mediante medidas excepcionales que han llevado a la cárcel a miles de personas acusadas por las autoridades de seguridad de participar en grupos criminales.
Analistas: Bukele enfocó discurso en seguridad, "tema que mediáticamente le ha favorecido"
Lo anterior le permitió esconder bajo la alfombra otros de los principales problemas que aquejan a la población, como la crisis económica, el desempleo, la falta de servicios básicos en las comunidades pobres, educación y pensiones, entre otros.
Desde el año pasado, el presidente Bukele ha venido postergando una reforma previsional en la que promete mejorar el monto de las pensiones para un retiro digno, pero ayer no mencionó ni una palabra al respecto.
Su discurso centrado en el combate a las pandillas abarcó el tiempo completo que estuvo el mandatario parado frente a los diputados de su bancada oficialista, funcionarios de gobierno y miembros de la comunidad internacional.
“Que el tema económico esté relegado a un segundo plano no es que no exista, la publicidad para posicionar la seguridad en la cabeza de la gente hace que cuando se contesta una encuesta se viene ese tema”
Roberto Rivera Ocampo, consultor
“Hoy no he venido únicamente para conmemorar un año más de Gobierno. Estoy aquí para decirle a todos algo que muchos pensaron que era imposible, hoy El Salvador está muy cerca de vivir una nueva realidad que por décadas nos fue negada: tener un país sin pandillas”, expresó Bukele.
Minutos antes de que emitiera su discurso en el que la crisis económica no existía, la casa calificadora S&P Global Ratings informaba que había bajado la nota para el Salvador de B- a CCC+, a causa de insolvencia para cumplir con una deuda que oscila entre el 80% y 90% del Producto Interno Bruto (PIB), aunque el ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya, dice que es menor.
En mayo, Moody’s, también redujo la nota de El Salvador, por el mismo riesgo de impago de la deuda.
18 % ve mejoras
Solo ese porcentaje de entrevistados por la UFG dijo ver mejoras en su economía en los tres años del presidente Nayib Bukele.
Bukele tampoco mencionó que la proyección de crecimiento que el gobierno tiene realmente no alcanzará a cubrir el nivel de producción que tenía el país en 2019 cuando asumió el gobierno y que según el Fondo Monetario Internacional se recuperará hasta 2023.
La caída del precio del Bitcoin tampoco fue parte de su discurso ni las trabas que ha tenido el gobierno para poder emitir los bonos volcán, con los que pondría a funcionar la ciudad Bitcoin en el Puerto de La Unión.
“Si no hay seguridad será imposible tener lo demás. Si no tenemos seguridad, ¿de qué serviría mejorar el sistema de salud y darle computadoras o tablets a los niños? ¿De qué serviría tener el mejor aeropuerto de Centroamérica? ¿De qué serviría tener CUBOS, un nuevo estadio y biblioteca nacional?”, fue la justificación de Bukele, como un recurso para evitar hablar de otros temas en los que, según encuestas recientes de universidades no sale muy bien parado.
Sin embargo, el alto costo de los alimentos de la canasta básica tiene a muchos salvadoreños ahogados económicamente.
El talón de Aquiles es la economía, dice encuesta
“El punto débil es la economía, queda claro por muchos aspectos, no solo por Bitcoin (…) el punto débil del gobierno es lo económico, pero el punto fuerte o muy fuerte es el de seguridad, salud y educación”, apuntó el Director del Instituto de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Universidad Francisco Gavidia (UFG), Óscar Picardo.
El sondeo fue realizado de manera presencial entre el 11 y el 15 de mayo a 1,306 personas a nivel nacional.
Desde 2001, la canasta básica de alimentos tenía un costo por debajo de los $100 en la zona rural y en la zona urbana costaba en promedio $125, sin embargo, eso quedó atrás y la realidad a la que se enfrentan los salvadoreños es distinta.
“La realidad económica de las familias salvadoreñas, el riesgo que tienen, no ha sido visibilizado en el discurso del presidente”.
Dina Argueta, diputada del FMLN
En 2021, la canasta básica superó los $200 en la zona urbana y para marzo de este año ya tiene un precio de $220, lo que representa un aumento del 76% respecto a lo que costaba en 2001.
Pese a esos números, para Zelaya, el ministro de Hacienda, “la inflación es un fenómeno más bien psicológico, que está en la mente de los empresarios y de la sociedad en general”, según lo que manifestó en una entrevista televisiva hace unos días.
La solución que el gobierno ha dado para mitigar un poco el alto costo del petróleo es subsidiar la gasolina, sin embargo, para algunos economistas aún con esta medida, como el país es importador de todo lo que consume, los precios ya vienen elevados, ya que en los países de origen de los productos que se compran, la gasolina no tiene el subsidio vigente en El Salvador.
Roberto Rivera Ocampo, consultor de políticas públicas y desarrollo local, consideró que fue “un discurso político” y dirigido “a cierto público”.
Rivera dijo que le hubiera gustado escuchar son las medidas económicas.
“El tema económico que esté relegado a un segundo plano no es que no exista, la publicidad para posicionar el tema de seguridad en la cabeza de la gente hace que cuando se contesta una encuesta se viene ese tema”, manifestó.
Indicó que hubo aspectos que el mandatario mencionó en su discurso que pudieron haberse ahorrado “decir que hay quienes quieren tomar decisiones por nosotros, eso debe resolverse por la vía diplomática no en discursos y más en la Asamblea”.
El FMLN también criticó que Bukele solo se refirió al régimen de excepción.