La falta de drenajes y la inclinación del suelo provoca que sesenta personas, que conforman diez familias, tengan un pantano en sus casas debido a las lluvias.
Las personas residen en la parcelación El Capricho, calle hacia el cantón Palo Pique, en Ahuachapán, y enfrentan el problema desde hace una década; sin embargo, la problemática se ha agravado en los últimos tres años.
Los patios de sus terrenos pasan inundados durante el invierno; pero cuando llueve por un tiempo prolongado, como la pasada tormenta Julia, el agua llega hasta las casas. Algunas son de adobe por lo que se vuelven más vulnerables.
“Nosotros siempre solicitamos ayuda; pero nunca nos han ayudado de ninguna manera. Nadie ha venido a decir ‘ustedes necesitan ayuda’, hasta ahorita solo pasan en la calle, viendo que estamos bien inundados y nada (de recibir ayuda)”
Nanci Solís, afectada
La situación provoca riesgo de enfermedades de la piel e intestinales para los habitantes.
Una de las residentes, Nanci Solis, explicó que el agua que ingresa a sus terrenos es la que corre por la calle que conduce hacia el cantón Palo Pique y otra parte baja de cerros y zonas altas que rodean el lugar.
“Aquí no tenemos donde corra el agua. Nosotros tenemos riesgo de zancudo, culebras que a veces salen buscando las casas, y hay muchas enfermedades para los niños. Nosotros tratamos la manera que ellos no se enfermen pero hasta en el día hay bastantes zancudos”, explicó la fémina.
La alternativa que proponen para solventarlo es la construcción de drenajes en los terrenos que se inundan; pero varios afectados señalaron que no están en sus posibilidades realizar dicha inversión porque son familias de escasos recursos económicos.
Las personas han solicitado ayuda en la alcaldía; pero por el momento no hay obras para mitigar el riesgo de las familias.
Las obras que piden se hacen difíciles de ejecutar por ser terrenos privados.
Las personas dejan de utilizar los patios de sus casas porque el agua les llega arriba de las rodillas en algunas zonas.
A pesar del riesgo que representa, muchos niños utilizan el agua para nadar.
“Nosotros nos afligimos porque ya tenemos varios años que se nos llenó de agua la casa, nos tocó salir. Pedimos ayuda, que pudiéramos sacar el agua o rellenar. Uno como no tiene ‘pisto’”, expresó otra afectada, Gladis Solis.
Una fuente de la alcaldía indicó que enviaron maquinaria “para apoyarles con los trabajos de mitigación cuando se les dio el problema”. Cuando se le consultó si tenían previsto la introducción de tuberías, dijo desconocer sobre dicho tema.
El Fondo de Conservación Vial (Fovial) señaló que no han recibido denuncias sobre la problemática de las familias y descartó que se deba a trabajos de mejora de calle que ellos realizan, tal como lo exponen algunos habitantes.
La entidad coincidió con los afectados, al señalar que los terrenos están abajo del nivel de la calle.
“En la calle hay una tubería tapada que puede agravar la situación debido a que (el agua) la descarga a un terreno privado. Hay que trabajar como treinta metros, haciendo un zanjón que permita evacuar el agua de la tubería. Ese trabajo no lo hacemos en terrenos privados como Fovial”, indicó la fuente de la institución.
Agregó que verificarán que la tubería esté sin obstrucción; pero que es necesario el trabajo complementario para que funcione la alternativa planteada.
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