“A esto no le puede llamar juicio porque no se está realizando bajo un Estado de Derecho sino bajo un Estado policial, donde no hay derecho a la defensa”, denunció el director del semanario Confidencial al ser entrevistado por Teletica.
Chamorro explicó que siete precandidatos presidenciales que ponían en riesgo la continuación de Daniel Ortega en el poder han sido condenados en procesos judiciales sin garantías ni imparcialidad.
“Unos han sido acusados de traición a la patria, de conspiración, de menoscabo a la soberanía nacional o de ciberdelito”, explicó.
Su hermana, Cristiana Chamorro, fue condenada a ocho años de cárcel y una multa 3.2 millones de dólares con la acusación de lavado a través de la fundación Violeta Barrios de Chamorro. “Sin embargo, los fondos que administraba la fundación Violeta Barrios de Chamorro provenían de organizaciones internacionales de desarrollo, como USAID. Junto a ella fueron condenados un chofer y dos excontadores de la Fundación”, explicó Chamorro.
“Y USAID en todo momento dijo: estos fondos han sido utilizados correctamente, es decir, no provienen del narcotráfico ni del crimen organizado”, agregó.
La pena se cumplirá en arresto domiciliario. “Esperamos que esto sea ampliado a otros reos de conciencia que son de la tercera edad o tienen enfermedades crónicas, como Violeta Granera, Víctor Hugo Tinoco o Pedro Joaquín Chamorro”, dijo.
Mientras tanto, Juan Sebastián Chamorro, Félix Maradiaga, Miguel Mora y Medardo Mairena fueron condenados a 13 años de cárcel; Arturo Cruz, a nueve años, y Noel Vidaurri y a Pedro Joaquín Chamorro, a ocho años. La célebre exguerrillera Dora María Téllez está en confinamiento solitario.
“Estamos ante una fabricación de delitos”, sentenció.
¿Por qué?
“Todo esto está subordinado a la maquinaria policial. Esos señores que están presidiendo esos juicios están con un teléfono celular recibiendo órdenes de la Fiscalía, del Carmen, etc. Y esto es simplemente una simulación de un proceso judicial que fue decidido muchos meses atrás, cuando Daniel Ortega constató que había perdido las elecciones del 7 de noviembre”, explicó el periodista.
Entre mayo y noviembre fueron detenidas 56 personas, entre ellas líderes estudiantiles y empresariales, periodistas, defensores de derechos humanos. 52 de ellos ya fueron condenados.
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Los presos políticos que están en el Chipote han sido sometidos a nueve meses de torturas, aislamiento, alimentación inapropiada y falta de atención médica y muchos de ellos están en condiciones graves de salud. Sólo les han permitido una visita cada dos meses.
Para Chamorro, el objetivo de fondo de Ortega es eliminar el liderazgo político del país e imponer un régimen totalitario, cerrar el espacio político.
Ciertamente, explicó el entrevistado, en Nicaragua hay un control total, “todo el mundo se siente vigilado por este Estado policial”, pero también hay un malestar silencioso que se expresa en trabajadores del sector público, y la muerte en prisión del general Hugo Torres, que un héroe sandinista antisomocista,, causó también malestar en las filas del ejército.
Chamorro lanzó un llamado a los demás países de la región a defender sus democracias, para que no les pase lo que a Nicaragua.
“Todos los países de la región deberían verse en el espejo del autoritarismo de Ortega, porque si no se le pone límite a esta dictadura, los autoritarios de izquierda o derecha que hay en nuestra región van a tomar nota de eso y van a seguir avanzando en detrimento de nuestros pueblos”, advirtió.