La falta de mejoras profesionales para los docentes y de la dotación de una infraestructura adecuada para los centros educativos, incluyendo laboratorios, bibliotecas y recursos didácticos, así como la superación del rezago en la enseñanza y la deserción escolar, son las grandes deudas que especialistas educativos señalan en el cuarto año del gobierno de Nayib Bukele.
El director del Instituto de Ciencias de la Universidad Francisco Gavidia (UFG), Oscar Picardo, señaló que el tema de infraestructura es una de las tareas pendientes por parte de Educación, a pesar de que el presidente Bukele dijo, en septiembre del año pasado, que iban a remodelar 5,150 escuelas en todo el país y que 1,000 serían reconstruidas en el primer año a partir de esa fecha.
El anuncio del presidente fue tomado con alegría por muchos docentes; pero ocho meses después de aquel ofrecimiento, algunos están desilusionados porque las condiciones en sus centros de estudio continúan igual. (Ver detalles en páginas 4 y 5).
Marlene D., quien es docente del área rural de Ahuachapán y que prefiere reservar su nombre y el de la institución por miedo a represalias, señaló enfáticamente que el gobierno “no ha cumplido el mejoramiento de la infraestructura”.
En su centro escolar hacen falta pupitres y las puertas de los servicios sanitarios están dañados, por mencionar algunas deficiencias de su institución. Gracias a una organización obtuvieron la donación de pintura para su escuela; pero continúan careciendo de material didáctico para el aprendizaje de los alumnos.
La docente reiteró lo expuesto por Picardo, en el sentido de que los programas sociales que el gobierno heredó se ejecutan con carencias.
La realidad contradice el discurso de Bukele
Alimentación
A pesar de que recibieron frijol, azúcar, aceite, cereal, y arroz, este año ya no les proveyó de leche y la harina que les dio fue insuficiente para la demanda de alumnos, que cursan desde parvularia hasta noveno grado.
“Ya no da la misma cantidad para cocinar”, lamentó la educadora, quien debe abordar dos unidades del transporte colectivo para llegar hasta su centro de estudios.
Los padres de los alumnos deben complementar con insumos para la preparación de algunos alimentos, entre ellos, leche ya que el gobierno no les dio a pesar de que en el paquete iba cereal.
Picardo lamentó que no existe información por parte del gobierno sobre los alcances que se han tenido en el tema de educación.
“Lamentablemente no hay ningún indicio, ninguna evidencia, que podamos concluir que algo ha mejorado… No hay nada nuevo en las condiciones laborales; en el tema de infraestructura que de vez en cuando aparece alguna escuela, pero así como aparece una escuela que la han mejorado aparece otra que también está en ruina. El Presidente prometió que iban a hacer dos escuelas diarias, que iban a remodelar, lo cual era absurdo desde el punto de vista de las posibilidades reales”, dijo el investigador educativo.
Además, agregó que el porcentaje de deserción escolar es muy alto en las escuelas ya que de cada 10 estudiantes que terminan el sexto grado, cuatro se gradúan de bachilleres y únicamente dos ingresan a la universidad. “Ahí no se ha hecho nada, ninguna intervención para revertir ese problema de matrícula escolar; y de calidad, no sabemos mayor cosa”, lamentó.
Añadió que en los últimos años no ha habido datos estadísticos, ni globales ni parciales, “de absolutamente nada”, como de matrícula o de la prueba Avanzo.
“Entonces tenemos una primera barrera de temas de información confiable y válida que nos permita saber si hay avance o no hay avance. Lo único que supimos fue que entregaron unas laptops y unas antenas de Starlink (internet); pero son cosas muy parciales, muy fragmentadas. Y en términos de calidad no tenemos ninguna información de avances, con los diálogos que tenemos con docentes. La situación está como estática, no se sabe nada de desarrollo curricular, de libros de texto, de capacitaciones en los últimos tres o cuatro años”, señaló Picardo.
Mejoras a maestros
La dignificación del gremio educativo, indicó, aparece en todas las políticas y planes de gobierno; pero tampoco tiene indicios de algún avance. Capacitaciones sobre la ley Crecer Juntos y otra sobre certificación de docentes en el área de educación superior son las únicas que los educadores han recibido, o al menos de las que se tienen conocimiento públicamente.
La maestra ahuachapaneca no precisó sobre qué tipo de capacitaciones les ha brindado el Ministerio de Educación, pero señaló que son las adecuadas aunque se quejó que son en línea y con una duración de hasta dos horas. Esto genera que se terminen los planes de datos que ellas pagan en sus teléfonos celulares debido a que, en la mayoría de las escuelas, no cuentan con el servicio de internet.
En otros casos deben de ocupar su tiempo en las noches, tras las jornadas laborales, para actualizarse a través de videos que son puestos en línea.
El presidente de la Asociación de Colegios Privados de El Salvador (Acpes), Javier Hernández, señaló que para mejorar la educación se debe realizar una transformación del sistema en general, incluyendo el público y privado.
Agregó que lo anterior incluye reformas educativas para tener un “magisterio robusto, de calidad” con la finalidad de transformar el plan de educación a uno viable y no pensar en “remiendos educativos”.
Vicepresidente Félix Ulloa dijo que desconocía los anuncios hechos por Bukele
Rezgado educativo
Uno de los cambios que propone es que se realice una investigación para determinar si es factible mantener en el país dos calendarios escolares, el internacional y nacional.
Esto incluye determinar si el internacional es el más adecuado para ser implementado en los centros escolares pues esto permitiría cambiar la formación, la acción y el perfil docente. Además de transformar las escuelas y colegios internamente, modificar la currícula y los proyectos extracurriculares ya que “la transformación es integral en todos los puntos de vista, con solo cambiar el calendario escolar. Se anhela y se cumple el sueño de estudios que lleven a instalar una normalidad de la enseñanza bilingüe, una normalidad en el tema de la tecnología, servicio y aprendizaje, una normalidad en el tema del trabajo de los valores como parte fundamental del sistema educativo, una normalidad en que podamos mover estudiantes del público al privado y del privado al público y del calendario de otros países a nuestro calendario, teniendo ya un calendario internacional activo”, señaló.
Para Hernández, los directores de las escuelas deben dejar de encargarse de los trámites que implica la entrega de los paquetes sociales ya que el fin primordial de los centros educativos es la enseñanza-aprendizaje. A su criterio, dichas acciones deberían ser ejecutadas por otras dependencias gubernamentales.