Gerardo Alfredo R., F., el motorista sobreviviente al accidente ocurrido el 17 de octubre, en Chirilagua, San Miguel, fue acusado el lunes por la Fiscalía General de la República por los delitos de lesiones culposas y homicidio culposo (ocasionar la muerte por descuido o negligencia).
Específicamente por, supuestamente, provocar un siniestro que causó lesiones a 51 víctimas y la muerte de 11 personas. Todos eran miembros de la iglesia Apóstoles y Profetas de playa El Tamarindo, en La Unión.
El sospechoso fue presentado ante el Juzgado de Paz de Chirilagua, de San Miguel, donde se pidió la prisión provisional mientras continúan las investigaciones en su contra.
Según los testimonios de sobrevivientes, el conductor del bus no pudo reducir la velocidad por fallo en el sistema de frenos en la curva donde ocurrió la tragedia. Las víctimas se dirigían hacia un entierro en Usulután.
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La tarde de ese martes nueves personas murieron en el lugar y otras dos perdieron la vida en el hospital, detallaron las autoridades.
El viernes 20 y sábado 21 de octubre familiares, amigos y hermanos en Cristo dieron el último adiós a los feligreses que fallecieron en el accidente. A la vela asistieron más de 4,000 personas y se suspendieron las fiestas por la tragedia.