Salvadoreños en el exterior solicitaron al Tribunal Supremo Electoral (TSE) que no inscriba la solicitud de Nayib Bukele y de Félix Ulloa como candidatos a la Presidencia y Vicepresidencia de la República, en tanto a que las leyes establecen que todo aquel que promueva la reelección presidencial, pierde sus derechos como ciudadano. Por tanto, la diáspora también pide que no se les permita ejercer el sufragio en 2024.
Los colectivos desconocerían una candidatura presidencial del actual gobierno, en el caso de que el TSE, contrario a las leyes nacionales, validara la solicitud de Nuevas Ideas de la fórmula presidencial Bukele-Ulloa, según explicó el colectivo Diáspora Democrática en Resistencia a El Diario de Hoy.
El Colectivo de Psicología de Abolición y Liberación (Nueva York), el Comité de Inmigrantes con Santa Marta (Estados Unidos), Comité de Solidaridad con El Salvador en México, la Comunidad Salvadoreña Monseñor Romero en Milán, Diáspora Democrática en Resistencia (Estados Unidos), Resistencia Comunitaria (Los Ángeles), Jaragua Migrante (California), Movimiento Centroamericano 2 de Marzo (Buenos Aires), Movimiento de Víctimas del Régimen (Estados Unidos), North Carolina Salvadoran Association, Salvadorean Alliance for Democracy (Washington), Salvadoreños en el Exterior (Virginia), Scanner Político (Washington) y Secretaría de Trabajadores Migrantes y Refugiados (Buenos Aires) son los firmantes.
“El señor Bukele Ortez se encuentra en estos momentos ejerciendo la Presidencia, por lo tanto está inhabilitado para ser candidato a un nuevo periodo presidencial consecutivo”, expresa la solicitud.
El militante de la Diáspora Democrática en Resistencia, Carlos Najarro, aseguró que la comunidad fuera de las fronteras reconoce la ilegalidad de la presentación de solicitud de Nuevas Ideas con la fórmula Bukele-Ulloa, y aseguró que validarse sería una evidencia de “dictadura”.
“El problema de aceptar la inscripción y que se siga la elección con la planilla de Bukele y Ulloa, es que ya no son unas elecciones libres, porque se está imponiendo algo ilegal”, explicó Najarro.
En conjunto, salvadoreños y salvadoreñas en el exterior externaron su solidaridad para quienes en el país se encuentran alzando su voz en contra de las violaciones democráticas y de derechos humanos por parte del régimen en turno.
“Como diáspora nos unimos y respaldamos los grupos del movomiento social en El Salvador, liderado por campesinos, jóvenes, trabajadores organizados e injustamente despedidos, víctimas inocentes del régimen de excepción, profesionales del derecho; quienes alzan su voz para exigir que se deniegue definitivamente la inscripción de la planilla de Bukele, y por último inhabilitarlo para que pueda ejercer el sufragio por violar el artículo 75 de la Constitución”, añade la solicitud colectiva.
El papel del TSE
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Según Najarro, la comunidad salvadoreña en el exterior espera que el papel de los magistrados y magistradas del TSE sea apegado a las leyes que juraron hacer valer, y de no ser así también desconocerían su accionar.
Esto, considerando que la Sala de la Constitución asegurara que en el país la reelección presidencial es “válida” y que Nuevas Ideas aprobó en enero de este 2023 que todo aquel que obstaculizara la inscripción de una persona para las elecciones populares, pagaría hasta con quince años de cárcel.
“En dado caso, los magistrados que aprueben esa candidatura, ya de por sí serían cómplices y estarían demostrando que están actuando en favor de lo que Bukele esté proponiendo (la reelección). Ellos serían cómplices de la misma dictadura, eso ya también está penado, se quieren lavar las manos en una resolución de una Sala que ha sido impuesta y que es ilegal”, expresó el militante de la Diáspora Democrática en Resistencia.
Este miércoles 1 comienza el periodo en que el TSE avise a los partidos o a las fórmulas presidenciales de cada uno de estos, si se aprueba, si se necesita subsanar algo, o si se deniega definitivamente la solicitud a candidatura presidencial.
El TSE ha recibido escritos de partidos políticos y de la sociedad civil para no inscribir a Bukele, todo con argumentos legales, pero estos han sido rechazados.