Una mujer se encontraba trabajando en su computadora cuando recibió un mensaje de una aplicación de envíos a domicilio en la que le mencionaban que por el tamaño de su pedido se tardaría más de lo esperado.
Kelsey Golden del sur de Texas descubrió que la razón del mensaje era porque su hijo había hecho una inesperada orden de 31 hamburguesas con queso.
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Barret, el hijo de Kelsey, había estado jugando con el teléfono inteligente de su madre con todas las aplicaciones desbloqueadas, mientras ella trabajaba en su computadora.
“Por lo general, le gusta tomarse fotos de sí mismo, y lo estaba haciendo. Pensé que había bloqueado el teléfono, pero aparentemente no lo hice porque entonces DoorDash vino con 31 hamburguesas con queso”, dijo Golden.
La familia Golden está en proceso de mudarse por lo que Kelsey ha estado muy ocupada entre el trabajo y el cuido de los niños.
El restaurante de hamburguesas más cercano donde pidió la orden se encontraba a 9,6 kilómetros, por lo que le sorprendió ver el pedido llegar a su puerta.
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“No sabía qué hacer con ellos, solo se comió la mitad de uno”, dijo Golden. “Así que publiqué en una página comunitaria en Facebook aquí en Kingsville y pregunté si alguien quería algo”.
En total el pedido salió a $61.58 dólares, pero el niño también dio una buena propina al repartidor por la aplicación de $16, por lo que al final salió en $91.70 dólares.
En el grupo de Facebook le compraron algunas de las hamburguesas y otros le dijeron como almacenarlas por más tiempo.