Outfits combinados y hasta su mamá incluida. Meghan Markle parece haber planeado hasta el más mínimo detalle al asistir al concierto que la diva Beyoncé ofreció el pasado 1 de septiembre en Los Ángeles.
La esposa del príncipe Harry no solo se lo llevó a él, sino también a su mamá Doria Ragland y a Abigail Spencer, ex compañera de reparto de Suits. El “crew” disfrutó del show en uno de los palcos VIP.
Según se puede apreciar en las imágenes que fueron captadas por otros asistentes al concierto, Meghan y su “pandilla” se vistieron en tonalidades de grises. Ella se enfundó una maxi falda color plata llena de lentejuelas y un top sin mangas en color crema.
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Pero su atuendo brillante no fue lo único llamativo, pues sus pasos de baile se robaron el show. Y es que la duquesa de Sussex decidió “desatarse” bailando al ritmo de ‘Queen B’.
Su desinhibida actitud contrastó con la del príncipe Harry quien se vio un tanto retraído. Esto generó un verdadero debate entre los internautas pues algunos le sugerían a Meghan que la próxima vez no lo lleve y otros alegan que él ya está hastiado.
Lo cierto es que hay otros videos en el que se ve a Harry un poco más animado e incluso se le vio cariñoso con su esposa.