La invasión de Rusia a Ucrania podría llevar a su destierro del deporte mundial y marcar una "ruptura" en la postura apolítica de las instituciones deportivas mundiales, señaló este viernes el geopolitólogo Lukas Aubin en una entrevista a la AFP.
Pregunta: ¿Cómo pueden reaccionar las instituciones deportivas mundiales ante este conflicto?
Respuesta: "Estamos en una situación extraordinaria en el sentido de que no experimentamos un conflicto así desde la Segunda Guerra Mundial. Se empiezan a tomar decisiones y serán un hito. Ciertos partidos de las eliminatorias para el Mundial de fútbol no podrán jugarse en Rusia porque los equipos lo rechazan. Vemos que todas las instituciones deportivas internacionales están tratando de marcar terreno e inclinar la balanza, ya que ahí estamos en un equilibrio de poder a escala planetaria. Las instituciones que generalmente tienden a ser reacias a involucrarse desde un punto de vista político y que se declaran apolíticas -además está escrito en la carta olímpica– están en proceso de cambio.
P: Este apoliticismo instaurado como ley intangible en los organismos deportivos, ¿puede sostenerse ante un conflicto de esta naturaleza?
R: "Hasta ahora ya hemos visto instituciones deportivas tomar decisiones contra ciertos países. Pero en general estas instituciones eran fuertes con países débiles y débiles con países fuertes. Y ahora, tenemos la sensación de que el momento es demasiado grave para que las instituciones deportivas digan 'bueno, realmente no podemos hacerlo porque es Rusia, Gazprom financia la Liga de Campeones, etc'. Tengo la sensación de que estamos en un punto de ruptura y que las medidas que seguirán serán inéditas".
P: ¿Cómo es de grande la esfera de influencia rusa en los deportes?
R: "Hay instituciones deportivas y federaciones que están dirigidas por rusos que están cerca del poder, pienso en particular en la Federación Internacional de Ajedrez o la Federación Europea de Judo, por ejemplo. Luego está el caso de los que son llamados en Rusia, los 'oligarcas de bolsillo', esa gente que Vladimir Putin movilizó a principios de la década de 2000 para invertir en el deporte ruso y mundial. Pensamos en Chelsea con Abramovich, por ejemplo, aunque él niega regularmente sus vínculos con Putin. Hubo muchas reuniones. entre Putin y los oligarcas para pedirles que invirtieran en el deporte. También existía esta idea de expandir la influencia de Rusia en el extranjero a través del deporte. También era una meta política, el poder blando, el objetivo principal era mejorar la imagen de Rusia. Hoy es más una herramienta de influencia, no es exactamente lo mismo".
P: ¿Podemos imaginar que esta red de influencia rusa cambie después del conflicto?
R: "Sí, pero creo que no hemos estado realmente en el poder blando desde hace algún tiempo. Tenemos la sensación, dado que los casos de dopaje se han sucedido, que este poder blando es más bien interno, utilizado por el presidente ruso sobre su población, pero que es menos eficaz en el extranjero que antes".
P: ¿Podría el deporte europeo, por ejemplo, sufrir una retirada masiva del patrocinio ruso?
R: "Desde un punto de vista financiero, si la UEFA decide separarse de Gazprom, habrá un impacto. Pero son grandes instituciones. Podemos imaginar que otro patrocinador lo reemplace. No les será difícil encontrar un gran patrocinador, sabiendo que la Champions League es una de las competiciones más vistas del planeta, pero si la UEFA llegara a separarse de Gazprom, sería un gran golpe, sentaría un precedente en la historia del deporte moderno y en el impacto que las instituciones deportivas internacionales puedan tener en los Estados y las relaciones internacionales".
P: ¿Podemos imaginar que Rusia sea excluida en los próximos días o semanas de las competiciones deportivas internacionales?
R: "Sí, es posible en el sentido de que el COI es el amo en su propia casa. En 2016, por ejemplo, la Agencia Mundial Antidopaje pidió excluir a Rusia de los Juegos Olímpicos de Río, pero el COI respondió que no. Si considera que la situación ya no es sostenible, el COI puede llegar hasta la exclusión".