Francia, que defenderá en Qatar el título logrado hace cuatro años en Rusia, ha quedado encuadrada en un grupo asequible, con Dinamarca, una vieja conocida en fases finales para los "bleus", como principal amenaza, pero también con Túnez y la selección que logre la plaza restante entre Perú, Australia y Emiratos.
La selección de Didier Deschamps perseguirá renovar el título mundialista, algo que solo dos veces se ha logrado en el pasado, Italia en 1938 y Brasil en 1962. En 2002, cuando defendía su primer título, al que habían sumado dos años más tarde la Eurocopa, no superó la fase de grupos en Corea del Sur y Japón.
Precisamente en aquella ocasión el último partido lo disputó contra Dinamarca, contra la que los hombres de Roger Lemerre tenían que ganar por dos goles de diferencia para seguir adelante. Pero el equipo, en el que finalmente pudo jugar Zinedine Zidane, lesionado hasta entonces, demostró el nerviosismo que desplegó desde su llegada a Seúl y acabó derrotado por los escandinavos por 2-0.
Será el duelo estrella del grupo. El seleccionador galo recordó que las dos veces que Francia ganó el Mundial, Dinamarca había aparecido en su camino. Túnez aparece, a priori, como un equipo que no les haría mucha competencia, y en duda está si Perú (contra el ganador del Australia-Emiratos Árabes) podría sorprender a alguien. De estos tres últimos candidatos, que disputarán repechaje, parece ser que los incas son los que tienen la estrellita de favoritos para clasificar al mundial, y ahí, pueden complicar a cualquiera, pero más para ser piedra de tropiezo que para avanzar de fase.
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