El partido de vuelta de cuartos de final entre Alianza y FAS, que se desarrollaba la noche de este sábado en el estadio Cuscatlán, fue detenido por emergencia, con varios aficionados del equipo blanco lesionados y con al menos 12 personas que perdieron la vida, según reportó la Secretaría de Prensa de Presidencia a las 10:01 p.m del sábado.
Versiones iniciales describen una posible estampida entre aficionados de Alianza. Muchos aficionados terminaron desmayados o lesionados, por lo que fueron evacuados desde los graderíos hacia el engramillado.
También hay asistentes al estadio que señalan que agentes de la Policía Nacional Civil habrían lanzado gases lacrimógenos contra aficionados que buscaban ingresar al escenario deportivo, lo que habría provocado la avalancha de personas, en las afueras de sol general.
Varios hinchas fueron atendidos con señales de asfixia o ahogamiento en el engramillado del estadio Cuscatlán, mientras recibían auxilios de personeros de cuerpos de socorro.
Según reportó Tigo Sports en su transmisión televisiva, el juego ha quedado suspendido.
La PNC confirmó que la información "preliminar apunta a una estampida de aficionados que trató de entrar a ver el partido entre Alianza y FAS".
En lo estrictamente deportivo, el juego de ida terminó 1-0 a favor de FAS.
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