Analizar todo lo ocurrido en el último año con referencia a la implementación del Bitcoin en el país no es posible sin tomar en cuenta la plataforma que desarrolló el gobierno a través de mecanismos que no están claros y que estaba pensada para dar respaldo a dicha iniciativa, es decir, la Chivo Wallet.
La creación de esta plataforma, que fue muy precipitada para varios expertos consultados en su momento por este medio, está también envuelta en el secretismo que rodea a todo lo relacionado con gastos públicos y, específicamente, a los gastos en Bitcoin.
El economista José Luis Magaña incluso ha calificado a toda la base empresarial de la Chivo como una “telaraña”, pues pese a que es considerada como una empresa privada, fue creada con fondos de la CEL hace más de 20 años y renombrada recientemente, en un proceso confuso donde hay personas ligadas a la extinta empresa de Alba Petróleos, según detalló una investigación de El Faro publicada el año pasado.
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A la fecha, algo que también se desconoce es cuánto dinero ha decidido gastar el gobierno solo para impulsar su uso entre los salvadoreños, sin embargo, y según algunas publicaciones del presidente Bukele, al menos en el tema del bono de $30 por registrarse en la plataforma ya se habrían destinado unos $120 millones para ese fin, los cuales se suman a otros gastos como el fideicomiso de $150 millones y los $107.1 millones en compras de bitcoins.
Con respecto a la entrega del bono de bienvenida en la plataforma, abogados han señalado con anterioridad que el gobierno debería rendir cuentas al respecto, pues no se sabe si en efecto el dinero se entregó a la cantidad de usuarios que el gobierno ha informado, los cuales serían unos 4 millones, aunque ese dato no puede comprobarse.
En ese sentido, algunos de los datos que también se desconocen en su totalidad son el valor de los contratos que el gobierno entabló con distintas empresas para desarrollar todo el ecosistema de la Chivo Wallet, pues en primera instancia, empresas como Athena estarían detrás de su desarrollo.
Además de esa empresa, posteriormente se conoció que otras como Netki y AlphaPoint también estuvieron involucradas, sobre todo, en el tema de la corrección de problemas de la plataforma, pues desde el primer minuto en que se puso a funcionar dio diversas fallas, según denunciaron los mismos usuarios a través de Twitter.
Lo anterior se refiere a fallas técnicas críticas que incluyeron la facilidad para ser víctima de suplantación de identidad, así como problemas con el registro o la pérdida súbita de fondos; situaciones que a la fecha continúan presentándose según las publicaciones en redes sociales.
De hecho, hasta la fecha no se conocen los avances de los avisos que cientos de personas pusieron ante la Fiscalía General de la República (FGR) por la suplantación de identidad de las que fueron víctimas, y según datos de Cristosal, solo hasta diciembre del año pasado se contabilizaban unos 151 casos registrados.
Informáticos que fueron consultados antes y después de que se lanzara la plataforma señalaron que como consecuencia de haber desarrollado la aplicación en solo 90 días se presentarían situaciones como las que precisamente ocurrieron una vez fue puesta en funcionamiento, algo por lo que la población perdió la confianza y el interés en utilizarla, según la opinión de economistas.
El poco uso de la Chivo
El propio 7 de septiembre de 2021, y los días que le siguieron, demostraron que una fuerte cantidad de salvadoreños habían decidido descargar la aplicación Chivo, pues casi en tiempo real, el presidente Bukele se encargó de ir actualizando los datos de usuarios que registraba la plataforma, los cuales eran bastante altos y prometedores.
Sin embargo, un año después de ese lanzamiento “exitoso”, son pocos los salvadoreños que utilizan la billetera virtual Chivo Wallet y sus cajeros, al punto de que incluso los comercios en el centro de San Salvador ya comenzaron a retirar los rótulos de “se acepta Bitcoin” debido a que la cantidad de personas que intenta pagar con la billetera virtual es mínima.
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El economista y expresidente del Banco Central de Reserva (BCR), Carlos Acevedo, señala que el principal indicador para definir el uso que tiene la aplicación en el país es el tema de las remesas, uno de los aspectos bajo los cuales Bukele justificó el lanzamiento de la plataforma. “(Chivo Wallet) les dará libertad y seguridad financiera, aparte de recibir beneficios, entre ellos el ahorro de $400 millones al año en comisiones para enviar y recibir remesas”, escribió el mandatario en un tuit publicado el 30 de agosto de 2021.
No obstante, los datos oficiales publicados por el BCR reflejan que la aplicación ha sido prácticamente ignorada, incluso, por los salvadoreños que envían remesas desde el exterior, pues de los $7,043 millones que ingresaron al país entre septiembre de 2021 y julio de 2022, solo $130.83 millones lo hicieron a través de la Chivo Wallet.
En términos de proporciones, la billetera estatal fue usada para enviar solo el 1.8% de todas las remesas que entran en el país, por lo que la promesa de ahorros en comisiones que hizo Bukele hace un año no fue tomada en cuenta por la población.
Al hacer los cálculos con base en los meses que lleva el 2022, ese porcentaje es aún menor, pues de los $4,416 millones que entraron al país entre enero y julio, solo $73.8 millones fue vía Chivo, lo que equivale a 1.67% del total.
Según la opinión de economistas, la principal razón por la cual los salvadoreños no han utilizado la Chivo para enviar remesas es por la poca confianza que tienen en la plataforma tras la serie de fallas técnicas que ha tenido, por lo que prefieren los canales tradicionales y tener la seguridad de que no habrá problemas con los fondos.
En ese sentido, el economista José Luis Magaña considera que el uso masivo que tuvo la plataforma al inicio fue solo por el bono de $30 que el gobierno ofreció por registrarse en la aplicación, pues actualmente “la gente no la usa para pagos y los pocos que la usan es para realizar trading”, es decir, operaciones de compra y venta de Bitcoin aprovechando la volatilidad.
En este contexto, otro punto que se ha quedado sin cumplir entorno a la Chivo Wallet es la denominada inclusión financiera que también promovió el oficialismo como argumento para implementar el Bitcoin. Acevedo afirma que “la inclusión financiera para los hogares de menores ingresos ha sido nulo”, algo en lo que también coincide Magaña.
Aun así, el ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya, afirmó a principios de agosto que la población continúa utilizando la billetera estatal, y que “la apuesta de El Salvador por el uso de Bitcoin y Chivo Wallet es una apuesta fuerte”, pese a que el precio del criptoactivo ha experimentado un desplome en los últimos meses causando pérdidas a los inversionistas y también a las finanzas del país.