Con la lengua de fuera, poco pelo y una piel arrugada son los curiosos factores que llevaron a “Mr. Happy Face” a ganar el certamen donde coronarían al perro más feo del mundo, el inusual hecho fue registrado en Petaluma, California.
Aunque llamar “feo” a la mascota de otra persona, no es precisamente un comentario bien recibido; sin embargo, todo cambia si estás participando en el concurso The Ugliest Dog in the World, celebrado en Estados Unidos.
El curioso concurso consiste en elegir al “perro más feo del mundo” entre los participantes, la competencia que llevaba dos años suspendida por las limitantes del Covid-19, ha regresado para buscar a las mascotas con esos característicos rasgos feos que pueden volverse “encantadores”.
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Para ser el ganador la mascota claramente debe contar con colores extraños, dientes salidos y otras características llamativas para aspirar a ser el ganador.
Mr. Happy Face, tiene 17 años, una enorme lengua que no puede mantener oculta, debido a su avanzada edad ya no puede caminar y debe usar pañales. El curioso animal que parece estarse burlando todo el tiempo es una mezcla de Chihuahua con Cresta China sin pelo.
El poco pelaje que tiene se esta volviendo blanco y este peculiar participante fue llevado al certamen por casualidad. Mr. Happy Face y su dueña se hicieron acreedores del primer premio de $1,500 y un viaje a la ciudad de Nueva York.
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La conmovedora historia de Mr. Happy Face
Su dueña Jeneda Benally, confesó que lo había adoptado 10 meses antes, originalmente iba a llevar un cachorro del refugio, pero cuando llegó por su mascota ya había sido entregado a otra persona, por lo que le sugirieron elegir otro animal.
Benally preguntó cual tenía menos opciones de ser adoptado, en ese momento conoció a Mr. Happy Face, quién tenía un pronostico desalentador de solo seis meses de vida, por lo que no dudo en regalarle todo lo mejor en sus últimos días.
Mientras Benally se encontraba California por trabajo una persona la alentó a participar en el concurso que se estaba desarrollando. “Prometí que le voy a dar la mejor vida que pueda. Quería devolverle el amor que sentía por él”, señaló Benally.
