Dos hombres que se encontraban recluidos en el penal de Izalco, en Sonsonate, murieron el lunes 6 de junio, en el Hospital Jorge Mazzini del mismo departamento, luego de ser trasladados por supuestos problemas de salud.
Las autoridades no han dado a conocer las causas de sus muertes, únicamente se informó que uno de ellos padecía de síndrome hipopotasemia severa.
Uno de los fallecidos fue identificado como Jairo Fernando Ayala Segura, de 22 años, originario de Acajutla, de quien se desconocen las causas de su fallecimiento. Sin embargo, la familia asegura que su muerte se debió por falta de asistencia médica dentro del centro penal.
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El cadáver fue llevado a la Morgue de Medicina Legal para su respectiva autopsia.
Con tristeza se despidieron de Jairo Ayala, sus familiares: "elevo una plegaria a Dios por el descanso eterno para el alma de Jairo Fernando Ayala Segura y quiero expresar mis más sinceras condolencias", expresó un familiar. Otros allegados dijeron: "fortaleza a la familia, que descanse en paz, pronto se hará justicia", "descansa en paz amigo, yo te conocí desde que eras pequeño desde que eras muy pequeño y me consta que eras inocente".
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El pasado 9 de mayo, sus familiares y amigos hicieron una denuncia a través de redes sociales donde exponían el caso de Jairo Ayala y aseguraban que era un "muchacho de estudios, trabajador". Según relataron, el domingo 8 de mayo, el joven regresaba de cortarse su cabello "y de la nada lo interceptaron los policías, lo tiraron al piso y lo golpearon. Preguntaban cosas que nunca se las podrá decir porque él no es ningún vago, ni drogadicto, ni nada. El muchacho es normal, reservado, tímido y de casa".
En la denuncia se detalló que Jairo había atravesado por una difícil situación donde estuvo hospitalizado. "Solo Diosito le permitió salir de la muerte. Está en tratamientos".
Mientras que el otro privado de libertad fallecido fue identificado como José Manuel Ramírez Orosco, de 26 años, alias "Chepe", residente del cantón Cara Sucia, en San Francisco Menéndez, Ahuachapán.
De acuerdo con el informe, murió en la Sala de Medicina del Hospital Jorge Mazzini, de Sonsonate, por padecer de "síndrome hipopotasemia severa", la cual consiste en una concentración demasiado baja de potasio en la sangre y es provocada por la pérdida de gran cantidad de este mineral en el tubo digestivo (debido a vómitos, diarrea o uso excesivo de laxantes).
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"Lamentamos informar el fallecimiento del joven José Manuel Ramírez Orozco, de 26 años", informó uno de sus familiares, quien contó que "José fue capturado en su casa de habitación hace 23 días y trasladado al penal de Izalco, Sonsonate"
La noche de ayer, su familia recibió la noticia de la muerte del joven y según dijeron, no les dieron explicación alguna sobre su muerte. Además, contaron que José Ramírez deja un hijo de 8 años.
José Ramírez se encontraba recluido en Sector 4, del Complejo Penal de Izalco, acusado por el delito de agrupaciones terroristas.
Ambos jóvenes fueron capturados bajo el régimen de excepción
Las muertes de los recluidos en el penal de Izalco, han causado indignación en los salvadoreños y muchos de ellos expresan su descontento.
"La verdad fuera bueno que se llevaran a los que verdaderamente andan en malos pasos y no a gente que anda en nada. Están dejando de luto a la familia salvadoreña por cumplir con las metas que les ponen. Triste realidad de nuestro país El Salvador", "Mi pregunta es; ¿Los golpean los custodios o los matan los internos?, pero nada dicen de los casos". "Algo están pasando dentro de los penales", son algunos de los comentarios de los ciudadanos.
Desde que inició el régimen de excepción, el 27 de marzo, varios reclusos del penal de Izalco han muerto luego de ser trasladados al Hospital Nacional de Sonsonate.