El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, exaltó ante su par salvadoreño, Nayib Bukele, el valor de los Acuerdos de Paz que pusieron fin al a la guerra en El Salvador, un acto histórico que Bukele ha calificado “como farsa” o “pacto de corruptos”.
Sin embargo, para el mandatario mexicano el hecho es de suma importancia, pues su país fue sede de la firma plasmada el 16 de enero de 1992 en el Castillo de Chapultepec.
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Los Acuerdos de Paz de El Salvador “son orgullo para los mexicanos”, expresó con vehemencia durante el discurso que pronunció frente a Bukele y la prensa este viernes para dar a conocer las temáticas abordadas tras la reunión que ambos sostuvieron.
Antes de entrar de lleno a los anuncios acordados con Bukele, López Obrador hizo una reseña histórica de El Salvador y reflexionó sobre algunos hechos que han marcado al país centroamericano y de los que la nación mexicana ha sido parte, entre estos su rol en los acuerdos de paz que pusieron fin a 12 años de guerra.
En ese sentido se refirió a la declaratoria sobre El Salvador que México y Francia emitieron en conjunto en agosto de 1981 en la en la que se reconoció al Frente Farabundo Martí de Liberación Nacional (FMLN) “como una fuerza política representativa”.
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AMLO prosiguió: “Año y medio más tarde, el gobierno mexicano propuso la creación del grupo Contadora, que en el caso de El Salvador se consiguió la paz, esa solución provino de acuerdos que se suscribieron en 1992 y es un orgullo para nosotros los mexicanos, porque esos acuerdos se firmaron en el Castillo de Chapultepec, en la Ciudad de México”, subrayó.
López Obrador también reflexionó sobre los acontecimientos ocurridos durante la dictadura de Maximiliano Hernández Martínez en El Salvador.
“La pobreza, la desigualdad, el autoritarismo y la falta de democracia fueron los principales combustibles de la tragedia y de la trágica guerra que azotó a este país en las últimas décadas del siglo pasado”, reseñó.
Oficialismo derogó conmemoración
Entre tanto, Bukele y sus diputados de la Asamblea Legislativa han arremetido contra la conmemoración de los Acuerdos de Paz que este año cumplieron 30 años.
Fue en el caserío El Mozote, donde el Ejército masacró a unos 1,000 personas en 1981, donde Bukele dijo que los Acuerdos de Paz son una “farsa”, al igual que la guerra de los años 80.
“La guerra fue una farsa (...) mataron a 75,000 personas entre los dos bandos (la guerrilla y el Ejército), incluyendo los 1,000 de (la masacre de) El Mozote, y fue una farsa como lo son los Acuerdos de Paz”, señaló en declaraciones retomadas de la agencia EFE del 16 de enero de 2022.
El mandatario, incluso, ha señalado que la firma de la Paz y el armisticio representa un “pacto de corruptos”.
Mientras, la bancada oficialista procedió a derogar la conmemoración y en su lugar decidió dedicar el día a las víctimas de la guerra civil (1980-1992).