Irina Starikova, una de las franco tiradoras rusas más “infames”, fue lesionada durante un combate contra las fuerzas ucranianas y abandonada a su suerte por su tropa. “Bagira”, su nombre clave en guerra, es la responsable de decenas de muertes entre civiles y militares.
La mujer de 41 años fue encontrada en el campo por una tropa ucraniana, a la que suplicó la dejasen morir antes de capturarla; sin embargo, Bagira fue llevada por los militares para recibir atención médica y permanecer bajo custodia.
La francotiradora con amplia carrera militar pertenecía a la 11ª División de Operaciones Especializadas. Su detención fue confirmada por Giorgi Revishili, investigador del Departamento de Estudios de Guerra del King’s College de Londres, quien afirmó en Twitter que los soldados ucranianos habían dirigido una ofensiva contra la tropa rusa logrando dispersarlos.
“Las fuerzas ucranianas capturaron a una infame francotiradora que luchaba en el bando de ORDLO, llamada Bagira”, haciendo referencia a las regiones separatistas de habla rusa, escribió Revishili.
Según la publicación de algunos medios locales y las investigaciones de Revishvili, Bagira es responsable de “la muerte de 40 ucranianos, incluidos civiles” a partir de la ofensiva dirigida el 24 de febrero. Mientras que los medios británicos señalaron que Starikova originaria de Serbia es perseguida por las autoridades ucranianas desde 2014.
Starikova es madre de dos niñas de 11 y nueve años. Por su trabajo militar ha recibido la medalla por la valentía George Cross, un honor que solo otorga el gobierno británico.
Posteriormente se dio a conocer en el sitio ucraniano Obozrevatel que se habían puesto en contacto con un soldado identificado como Vlad Ivanov, quién aseguró que Starikova había recibido tratamiento por las lesiones al ser capturada y ella misma confesó que los soldados de su tropa “se fueron, sabiendo que estaba herida y tuvieron la oportunidad de recogerme... esperando que muriera”.