Francisco Sibrián, auxiliar técnico de AD Chalatenango, se dejó ver satisfecho por el desempeño de sus jugadores en la victoria 0-1 sobre Águila en San Miguel, en la noche que estos festejaban sus 96 años de vida institucional.
"En resumen, fuimos muy valientes, tuvimos mucha confianza y no (estuvimos) confiados. Me parece que hubo mucha celebración previa (de Águila) y creo que antes de jugar ya nos daban por perdidos a nosotros. La satisfacción es que hemos comprobado que podemos competir en cualquier lado y contra cualquier equipo", resaltó el entrenador.
Un pastel envenenado en San Miguel: Chalate les arruinó la fiesta a los del Águila
Confesó que junto a su principal Erick Dowson Prado esperaban que la tensión del partido se inclinara en contra de Águila, que se sabía obligado a obtener el resultado ante su público.
"Estos partidos los vivimos desde adentro y en cierto momento la presión ya no iba a ser para nosotros. Si Águila no era efectivo, la presión sería para ellos y al final del primer tiempo yo lo vi claramente, se juntaron en medio de la cancha a discutir un par de cosas, y nosotros sacamos lo mejor de nosotros, aprovechando las debilidades que ellos como grupo tenían", explicó.
Por su parte, los jugadores Roberto Domínguez e Iván Barahona reconocieron que la consigna chalateca iba de "unirse a la fiesta o arruinársela" a un Águila que llegaba invicto a esta séptima jornada del torneo Clausura '22. "Ellos estaban en su fiesta… Vinimos, nos plantamos con mucha personalidad y salimos a presionar a Águila, lo pusimos nervioso y eso nos funcionó tácticamente para llevarnos el partido", afirmaron.