Un jugador fue sancionado nada menos que con 24 partidos sin poder jugar luego de agredir al árbitro al final de un partido de fútbol sala.
Ocurrió en A Coruña, España, cuando Diego M.P., según el reporte del Comité de Competición y Disciplina de la Real Federación Gallega de Fútbol, se fue sobre el réferi al momento en el que este iba a expulsar al agresor, el 3 de febrero, en un juego contra el Betsfry de la copa A Coruña de Segunda Autonómica.
"Me golpeó durante unos cuarenta segundos, causándome contusiones en el pecho y en el hombro izquierdo, como se confirmó después cuando me atendieron en un centro médico", dijo el agredido al medio La Voz de Galicia.
En el fallo, el Comité puso incapié en que el agresor golpeó al árbitro en reiteradas ocasiones.