En el Día de los Derechos Humanos, la Unión Europea (UE) celebra, junto con el resto del mundo, el 75.º aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos (DUDH). Ese documento marcó un hito al sentar las bases de nuestro sistema mundial de derechos humanos, así como de las leyes nacionales y los tratados internacionales que protegen y promueven los derechos humanos, y del Convenio Europeo de Derechos Humanos (CEDH) en Europa. Hoy sigue siendo tan válido y crucial como hace setenta y cinco años.
Los derechos humanos trascienden las fronteras y las culturas; son inherentes a cada persona, sin distinción. Aunque en los últimos setenta y cinco años se han logrado avances significativos, las crisis siguen multiplicándose y con demasiada frecuencia son las mujeres, los niños y las personas en situaciones vulnerables las que soportan la mayor carga de las consecuencias de la guerra y los conflictos.
El respeto, la protección y el cumplimiento de los derechos humanos son esenciales para promover la justicia y la rendición de cuentas y poner fin a la impunidad. Ahí radica uno de los valores y principios fundacionales de la UE. El fomento de los derechos humanos es, además, una prioridad clave de la acción exterior de la UE con la que estamos firmemente comprometidos. La UE seguirá condenando las violaciones y los abusos de los derechos humanos, las vulneraciones del Derecho internacional humanitario, la discriminación, la reducción del espacio cívico y los ataques a la democracia y a la libertad de los medios de comunicación dondequiera que se produzcan.
Además del 75.º aniversario de la DUDH, conmemoramos el 30.º aniversario de la Declaración y el Programa de Acción de Viena y el 25.º aniversario de la Declaración sobre los defensores de los derechos humanos, reconociendo su papel crucial de agentes de cambio positivo que se afanan por el fomento y el pleno disfrute de los derechos humanos. La DUDH sigue teniendo más importancia que nunca —y cabe esperar que siga sirviéndonos, por lo menos, otros setenta y cinco años más— ahora que aplicamos sus principios para superar los retos actuales en un mundo cada vez más digital y en el que nos enfrentamos ya a los efectos del cambio climático.
Es nuestro deber colectivo defender y promover los derechos humanos de todas y cada una de las personas en todas las partes del mundo. Al celebrar este hito, la Unión Europea reafirma su compromiso con la Carta de las Naciones Unidas y su solidaridad con las Naciones Unidas y con la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, así como con todas las organizaciones multilaterales y regionales, ante la misión de avanzar hacia la plena realización de los derechos humanos en todo el mundo. En consonancia con el objetivo de no dejar a nadie atrás, la UE ratifica también su compromiso de promover un enfoque de la cooperación para el desarrollo basado en los derechos humanos.
Los derechos humanos no son meras palabras escritas sobre el papel; son normas jurídicas de aplicación universal. Son los cimientos de la paz y la senda hacia una sociedad más justa, igualitaria e inclusiva para hoy, para mañana y para las generaciones venideras.
Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad
@JosepBorrellF