Un joven fue capturado por maltratar a su mascota en Montes de San Bartolo IV, Soyapango;otro hombre fue capturado por abandonar y causar la muerte de su perro en Huizúcar; un vecino de Soyapango fue capturado por lesionar con machete a un can; otro fue apresado en San Miguel por abandonar a su perra en un saco;otro fue arrestado por causar la muerte de su mascota al dejarla encerrada por horas en su auto; el Cuerpo de Bomberos ha rescatado canes de pozos e incendios…
Más que natural es que se protejan mascotas —aquí se llega incluso a priorizar construir un hospital para mascotas que uno para gente pobre—, que se pongan en orden iracundos vecinos que dañan el vehículo de alguien, que se sancione cuando un adulto maltrata a su mujer o a uno de sus hijos… la ley ordena que una función vital de las autoridades policiales es procurar que haya orden y respeto en ciudades, pueblos y cantones.
Pero otra cosa sucede dentro de los penales, donde se denuncia que carceleros y jefes de bandas se sienten con autoridad de apalear y patear, dejar morir personas sin procurarles asistencia alguna, como al joven de 22 años a quien le rompieron las costillas cuando lo pateaban, lo forzaron a estar colgado de sus manos y cuando sus compañeros de celda pidieron ayuda por respuesta les dijeron que “cuando se muera nos llaman para llevar el cadáver…”.
El régimen ha alegado ante la ONU que para mantener el orden fue necesario encarcelar a decenas de miles de personas —justos con pecadores— y para evitar que “los terroristas” salgan a la calle debió remover y sustituir a los magistrados de la Corte Suprema, nombrar a dedo a un Fiscal para “que todos estuvieran alineados”. Los funcionarios salvadoreños creen que estos atropellos generan simpatías ante el mundo, pero es obvio que sólo provocan asombro y repulsión entre las naciones con tradición democrática y respeto a los derechos humanos.
¿Cómo puede generar beneplácito entre los países que defienden la libertad saber que un régimen rompe la separación de poderes para asegurarse impunidad y condonar toda la brutalidad, incluyendo la “bienvenida” que se da a los que ingresan a las cárceles, consistente en darles patadas y garrotazos, hacer que se desnuden y se pongan en fila, insultarlos?
Organismos de derechos humanos registran la muerte de al menos 153 personas en la cárcel.
El mismo régimen ha salido a reconocer que tuvo que liberar a 7,000 inocentes después mantenerlos hasta meses injustamente tras las rejas, haciéndoles perder sus trabajos, estigmatizándolos y victimizando a sus familias.
Los castillos en las nubes suelen durar poco tiempo
Muchos que contemplan desde la llamada “sociedad civil” lo que sucede creen posible que al propio mandatario no le dicen exactamente lo que está sucediendo dentro de sus cárceles, un horror comparable a los campos de exterminio del nacional-socialismo hitleriano y los gulags del estanilismo, donde se dieron los más extremos casos de sadismo en nuestros tiempos.
Los alegatos del régimen salvadoreño en las Naciones Unidas no consiguen justificar lo que sucede en las cárceles en este país; la tortura, sea quien sea que la ejecute, es una afrenta contra la misma humanidad.
No descartamos que tales prácticas de horror sean revisadas, como la regla de no permitir a familiares de detenidos comunicarse con ellos y tener que depositar en dinero lo que los familiares de los detenidos envían pero sin saber si algo les llegó, si pudieron aliviar su dolor en alguna medida.
Si un individuo maltrata a un perro en La Unión es sancionado, pero que maten a personas por definición indefensas dentro de las cárceles es parte del plan para que El Salvador sea “el país más seguro del mundo”.
Por cierto, ante el intento oficialista de justificar los atropellos diciendo que por eso ahora “somos el país más seguro de Latinoamérica”, la cadena hispana de noticias Univisión salió a aclarar que el país más seguro de la región es Costa Rica, seguido por Uruguay, Argentina y Chile, y El Salvador ocupa el lugar 15 sólo después de Honduras.
“Se puede engañar a todos un corto tiempo, a algunos todo el tiempo pero no a todos todo el tiempo”… Tarde o temprano los castillos en el aire se desvanecen.