El exrector de la Universidad Centroamericana (UCA) de El Salvador, José María Tojeira, declaró al medio nicaragüense Divergentes.como que la embestida orteguista contra los jesuitas se debe “a su libertad y al respaldo dado a la vida y derechos de los nicaragüenses”.
A juicio del sacerdote, “las dictaduras odian siempre la inteligencia crítica, racional y humanista, sea llevada a cabo desde el pensamiento cristiano o desde el pensamiento laico. El impacto es sin lugar a dudas de un fuerte deterioro y empobrecimiento cultural”.
Por ejemplo, citó que el mejor archivo histórico de Nicaragua está en la UCA. “Si se consumara el robo de las propiedades de la UCA, estos ignorantes del gobierno entrarían en el archivo como tacuazín (zarigüeya) en gallinero”, explicó.
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Tojeira dijo que entre los jesuitas de Centroamérica “hay indignación y solidaridad con los compañeros nicaragüenses”, pero a los afectados porla confiscación de la UCA “se les pide resistencia y esperanza, que son también actitudes de los propios jesuitas”.
Recordó que la Compañía de Jesús ha sufrido ya el martirio de seis de sus miembros y dos colaboradoras en El Salvador, en 1989, algo que le tocó enfrentar muy de cerca por ser el provincial entonces.
“Los jesuitas están protegidos por su honradez y su servicio a la gente. También mucha gente solidaria los defiende a nivel internacional. No sé qué otra protección puedan necesitar a parte de las oraciones que muchos hacemos por ellos”.
El sacerdote no descarta que puedan expulsar a la congregación de Nicaragua. “No sería la primera vez que nos expulsan de un país. Pero en América Latina los gobiernos que expulsan religiosos acaban siendo también expulsados de sus puestos y poderes. Y los religiosos vuelven”, recordó.