Comezón, hinchazón y ardor en la piel. Esos suelen ser los síntomas de la enfermedad dermatológica popularmente conocida como sarpullido por calor.
"La miliaria, también conocida como miliaria ecrina, sarpullido por calor, sarpullido o sarpullido por sudor, es una afección de la piel que se observa con frecuencia provocada por el bloqueo de las glándulas sudoríparas y los conductos ecrinos", se detalla en el sitio de la National Library of Medicine de los Estados Unidos, www.ncbi.nlm.nih.gov.
El "rash", como también se le ha denominado en El Salvador, ataca no solo a los bebés e infantes, también suele ser muy común en los adultos.
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En el portal web de la Clínica Mayo se detalla que los "síntomas pueden abarcar desde ampollas pequeñas hasta bultos profundos e inflamados. Algunas formas de erupción por calor causan mucha picazón.
Por lo general, este sarpullido por calor suele desaparecer cuando la piel se enfría, y existen dos tipos: la miliaria rubra y la miliaria cristalina.
La primera aparece como un grupo de pequeñas protuberancias inflamadas, similares a ampollas, que pueden producir picazón intensa. La segunda aparece como protuberancias transparentes llenas de líquido que no duelen ni pican.
En adultos, suele brotar en los pliegues de la piel y donde la ropa roza. En los bebés, "la erupción se manifiesta, principalmente, en el cuello, los hombros y el pecho. También puede producirse en las axilas, en el pliegue interno del codo y en la ingle".
Ahora bien, aunque lo mejor es visitar siempre a un médico para consultar el mejor medicamento o método para contrarrestar la miliaria, también existen remedios caseros a los que puedes echar mano. Por supuesto, antes de aplicarlos debes probar si no eres alérgica a estos.
Para asegurarse de ello, coloca un poco en el dorso de tu mano y si se enrojece o irrita, lo mejor es desistir de utilizarlo.
Algunos de estos son baño de avena, compresas de caléndula y colocarse gel de sábila, pues poseen acción antiinflamatoria, calmante y cicatrizante para la piel, según lo indicado por el equipo de profesionales de la página web www.tuasaude.com. Acá te compartimos cinco de estos remedios.
Gel de sábila
Vas a necesitar dos pencas de la planta. Luego de cortarlas, lávalas bien y córtalas por la mitad. Después, retira el gel de su interior (sin usar la cáscara) y viértelo en un recipiente limpio y seco. A continuación, humedece una toalla limpia o una gasa y aplica en las regiones con sarpullido al menos tres veces al día.
Baño de avena
Para este necesitarás ⅓ de taza de harina de avena. Tritura la harina de avena en una licuadora hasta que tengas un polvo bien fino. Aparte, calienta agua para bañarte y colócala en un recipiente grande. Añadí el polvo y mézclalo unos 15 minutos o hasta que se disuelva. Te quedará de un color lechoso. Antes de tomar el baño habitual, deja que enfríe la temperatura. Luego de aplicarte el remedio, enjuaga el cuerpo con agua al tiempo y secate bien con una toalla limpia y suave.
Compresas de manzanilla
Para este requerís unos 20 a 30 gramos de flores frescas o secas de manzanilla y 2 ¼ de tazas de agua hirviendo. Añade las flores frescas o secas en el agua hirviendo y deja reposar unos 15 minutos. Luego, ya fría, con una gasa, algodón o paño limpio, aplica las compresas en la zona del sarpullido al menos dos veces diarias.
Hojas de neem
Reuní unos cinco gramos de hojas de neem y tritúralas en la licuadora con un poco de agua, hasta que se forme una pasta. Después, aplica un poco sobre el área del problema y deja que actúe de 10 a 20 minutos. Finalmente, lava con agua tibia y seca con una toalla limpia.
Loción de calamina
Para prepararla necesitas: ¼ de agua filtrada, 1 cucharada de arcilla bentonita o arcilla verde, 1 cucharada de bicarbonato de sodio, 1 cucharada de sal marina y 12 gotas de aceite esencial de lavanda o menta. Después, en un recipiente limpio y seco, añade los ingrediente y los remuévelos de forma leve. Si lo necesitas, puedes agregar un poco de agua filtrada hasta que tenga una consistencia pastosa. A continuación, aplícala en el área afectada de 2 a 3 veces diarias.