Armando Bruni: “Los Juegos son una oportunidad de oro”

Armando Bruni es el presidente del Comité Olímpico de El Salvador desde 2021. Y los Juegos Centroamericanos y del Caribe aparecen, según sus palabras “como una oportunidad de oro”.

"Estamos sumamente contentos y a la expectativa. Es un evento deportivo de gran magnitud que pasa una vez cada cantidad de años en El Salvador, es la tercera vez que vamos a albergar estos Juegos entonces creo que es sumamente importante".

La antorcha de los Juegos San Salvador 2023 comienza su recorrido

¿Qué significa tener estos Juegos en el país?

-Es importante porque tener juegos en el El Salvador al inicio de una gestión nos permite en el Comité reorganizar toda la estrategia deportiva olímpica en el país para poder tener otro tipo de resultados, saber que hay inversión en infraestructura deportiva, saber que va a haber un legado que los Juegos de deben dejar. Es importante para lo que se quiere hacer por lo menos en los próximos 10 años.

-Sentar las bases del trabajo a largo plazo.

-Yo soy de la filosofía que en el deporte no hay varita mágica, sino que hay que trabajar. Y se trabaja con base a la planificación. Y uno tiene que proyectarse que en 10 años, más o menos, vienen las generaciones en el deporte y nosotros tenemos que trabajar para la nueva generación de los próximos diez años. Estoy contento, a la expectativa y sabiendo de que El Salvador va a dar la talla para albergar esta fiesta deportiva.

-¿Qué espera El Salvador de estos Juegos a nivel general y a nivel deportivo?

-A nivel general esperamos que sea el inicio del desarrollo del deporte en los próximos años. Sabiendo de donde viene el deporte salvadoreño en los últimos años, tenemos que entender cómo se recibe el Comité Olímpico: un quinto lugar entre siete en Managua 2017, el peor resultado histórico en un Centroamericano; dos medallas de oro en los últimos Juegos Centroamericanos y del Caribe. Y una clasificación muy limitada a Juegos Olímpicos, un solo atleta de forma directa, los demás por invitación y un segundo atleta que se mete una vez cerrada la clasificación cuando se caen otros atletas ya clasificados.

Con estos resultados del último ciclo olímpico, yo creo que si le queremos apostar a que en diez años, empezando con este ciclo actual, tengamos resultados diferentes, obviamente tener estos juegos a nosotros nos sirve de base para proyectar adonde queremos ir. Que esperamos, por ejemplo, en los Juegos Olímpicos de Brisbane 2032, adonde queremos ver a El Salvador, si en algún momento vamos a tener posibilidades o no de pelear medalla olímpica, que actualmente no tenemos.

Claro, eso hay que trabajarlo y construirlo, la medalla olímpica no va a llegar de la noche a la mañana. Ahora, de cara a París 2024, una de las grandes apuestas para intentar alcanzar una medalla es Quique Arathoon, un atleta que ya tiene un trabajo y que nosotros hemos incrementado el apoyo.

En materia de país, estos Juegos es ver hacia el futuro, tener mejor infraestructura deportiva, tener tecnología, mejores condiciones para que el atleta pueda trabajar.

-¿Y en materia deportiva, a qué aspira El Salvador?

En el 2002, El Salvador tuvo 18 medallas de oro, un resultado bueno, el mejor de nuestra historia. Sin embargo, para el 2023 veo bastante difícil tener ese mismo resultado; sin embargo vamos a pelear podios y eso es importante porque creo que cada resultado positivo debe proyectarse como esa hazaña que dan nuestros atletas. Vamos a poder celebrar algunas medallas, pero lo que no se consiga en esta oportunidad, se está preparando la base para poderlo tener en los siguientes ciclos.

-¿Cuál es la proyección de medallas a las que apunta El Salvador?

-Dar un número de proyección de medallas es difícil porque los atletas que vienen de otros países también se están preparando y mejorando; dar una proyección exacta de medallas de oro, plata y bronce, es complicado. Y recordemos que en la obtención de medallas, la responsabilidad principal la tienen las federaciones deportivas, que trabajan día a día con el atleta, y luego venimos las instituciones que generamos un complemento en el atleta de alto rendimiento.

-Pero sí hay deportes con mayores expectativas

-Bueno, en tiro con arco evidentemente somos muy fuertes y hay buena proyección con Roberto Hernández, Paola Corado, Sofía Paíz, Douglas Nolasco; tiro deportivo con Israel Gutiérrez, Ana Ramírez; surf; bádminton con Uriel Canjura y aspiraciones de otra medalla; patinaje con Ivonne Nóchez y Marvin Rodríguez; karate con Jorge Merino, Gaby Izaguirre; remo con Roberto Carlos y Adriana Escobar, en vela Arathhoon.

O sea, son atletas que ya tienen una formación y en estos dos años incrementamos el apoyo y la progresión es muy positiva para mejorar los números que arrastramos en el último ciclo. Hubiéramos esperado también las de fisicoculturismo con Yuri y Paulina, pero no va a poder estar el deporte. Fútbol playa masculino también es candidato a medalla, en el fútbol once (Sub-22) es muy aventurado dar una postura porque se han sumado elementos jóvenes que pueden dar de que hablar, no estoy seguro para que nos alcance para repetir el oro ganado ante México en el 2002, pero darán pelea y ojalá puedan; puede ser una sorpresa.

-A propósito, ¿cómo es la relación del COES con el fútbol?

-Es como con las demás federaciones deportivas, cordial. Ahora que tienen un Comité Regularizador, la información fluye de una buena manera, nos reunimos periódicamente, respetamos plenamente la autonomía de Fesfut, pero nos hemos planteado tenerlos como un aliado para proyectos en concreto que tengan que ver con el ciclo olímpico. Le hemos planteado trabajar un proyecto de cara a Los Ángeles 2028.

Este comité Olímpico sueña con poder llevar a la selección de fútbol a esos Juegos Olímpicos. Fútbol playa ahora mismo está compitiendo activamente en Juegos del ciclo olímpico: Santa Marta, San Salvador, Juegos Mundiales de Bali que son del ciclo olímpico. Esto nos da mayor fluidez con la Fesfut.

-El Salvador llega a estos Juegos tras una de las peores actuaciones de la historia ¿Por qué tan bajo?

-Porque no había sido una prioridad socialmente hablando, de país. Yo no responsabilizo a nadie, creo que todos somos responsables y digo somos porque yo estoy en la dirigencia deportiva desde el 2017, he sido parte del sistema. No hubo prioridad desde el gobierno, no hubo prioridad desde el Indes, no hubo prioridad desde las mismas federaciones deportivas, no hubo prioridad desde el Comité Olímpico. O sea, se trabajó con lo que se tenía. No había escenarios deportivos de nivel, atletas que en el COES me han venido a comentar su realidad, han competido y entrenado con equipos que se dieron en el 2002.

Por ejemplo, en tiro deportivo, un rifle del 2002 a la fecha con miras gastadas o en mal estado, nos pone en desventaja competitiva con cualquier país de la región que actualice su equipo. El sistema en general se ha prestado para que El Salvador no tenga buenos resultados. No hay que caer en lo que se cayó en 2002, sueño que ahora todos los actores del deporte vayan de la mano, Comité Olímpico, Gobierno, INDES, la empresa privada, que es fundamental. Y la prensa deportiva, que pueda ser esa vitrina de héroes. Creo que si nos unimos partiendo desde estos Juegos de cara a los próximos 10 años, estos resultados se tienen que corregir. Así lo hicieron en otros países.

-Por ejemplo...

-Es lo que ha hecho Colombia, en 2002 no era rival a vencer, hoy si. Porque en los últimos 15 años Colombia entendió el mensaje que hay que trabajar de forma articulada y poner al país y a los atletas sobre los intereses de cualquier institución. Guatemala lo hizo en su momento, hay un tema de recursos diferente pero no todo es recursos, también es tema de voluntad.

-Durante muchos años, el COES y el Indes han estado alejados y hasta en disputas privadas y públicas, ¿hoy ha cambiado la situación?

-Yo soy presidente de la Federación de Bádminton y he sufrido esa lejanía entre el Comité Olímpico y el Indes desde la parte federativa. Cuando inicié el proyecto de un plan que cambiara la estructura olímpica del país, dentro de mi visión estuvo que, independientemente quien esté en la parte gubernamental, debería haber una alianza gobierno y Comité Olímpico. Colombia, México, Chile, son grandes ejemplos cercanos de que si se mantiene esta alianza, veremos resultados positivos.

Mi línea de trabajo es que mientras yo esté en el COES, independientemente quien esté en el gobierno, voy a intentar construir puentes para poder optimizar los pocos recursos que tiene El Salvador en pro del deporte y los atletas. En ese sentido, he mantenido reuniones periódicas con Yamil Bukele, se ha construido una mesa de trabajo permanente desde la parte técnico-deportiva para manejar la misma información; en la parte financiera intentamos que no se dupliquen los esfuerzos de los recursos y se le está dando seguimiento a las federaciones para que puedan planificar.

-¿Cuál es la clave para esa relación?

-El respeto, el COES respeta al INDES como el ente rector del deporte que desarrolla la política gubernamental en materia deportiva; y el INDES respeta al COES como ente rector del deporte, máxima autoridad deportiva representando a El Salvador en el ciclo olímpico. Mientras se mantenga ese respeto y autonomía que tiene que tener cada institución, ni Indes trata de imponer líneas gubernamentales en el COES, ni el COES intenta imponer su filosofía de trabajo olímpico en el Indes. Así vamos a poder seguir coexistiendo juntos apoyando a las federaciones. En estos dos años se ha podido hacer y espero que así sea a lo largo del tiempo. Y si yo salgo del Comité Olímpico, dejar sentada esa base para quien asuma luego.

-¿Cómo imagina los Juegos y lo que vendrá después?

-Para mí realmente los Juegos son una fiesta deportiva. Una fiesta y así hay que dimensionarlo. Visualizo los Juegos con una afición, con un pueblo volcado a los Juegos a los escenarios, apoyando a los atletas nacionales y disfrutando, vamos a tener atletas campeones mundiales y olímpicos compitiendo en El Salvador. Es un lujo que vamos a tener como país.

Es una oportunidad para que el pueblo conecte otra vez con el deporte, para que todos podamos dimensionar lo que el deporte es capaz de producir. Y que sea un espaldarazo para que el Comité Olímpico logre ganar posicionamiento internacional, que hemos carecido en los últimos años. Hemos desarrollado un programa donde buscamos producir liderazgo salvadoreño en el ámbito internacional, si nosotros le exigimos a nuestros atletas ganar a nivel internacional, también el dirigente deportivo tiene que hacer lo mismo y posicionarse en ámbitos internacionales.

Producir liderazgo salvadoreño en el deporte internacional. En bádminton fui electo presidente de la Confederación Panamericana de Bádminton lo que creo que posiciona un liderazgo sólido para un salvadoreño. Los Juegos nos van a dar ese espaldarazo. Los Juegos son una oportunidad de oro para El Salvador.

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