Los jugadores del Nápoles fueron recibidos en la madrugada del domingo al lunes por miles de tifosi en su regreso a la ciudad tras su victoria contra la Juventus (1-0) en Turín, que les ofrece la posibilidad de ganar el Scudetto desde este domingo.
Pancartas, banderas y cantos se fundieron en la llegada de los jugadores poco antes de las 03h00 de la madrugada (hora local), en el aeropuerto de Nápoles-Capodichino, según las imágenes difundidas por la prensa italiana y los propios futbolistas en las redes sociales.
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Victor Osimhen y Khvicha Kvaratskhelia, las dos estrellas del equipo de Luciano Spalletti, se subieron al techo del autobús del equipo para saludar a los miles de tifosi. El vehículo, tras dejar atrás a la multitud que se había reunido para celebrar un título que casi tiene en el bolsillo, fue seguido después por decenas de motocicletas en la ciudad.
Nápoles, que tiene ahora 17 puntos de ventaja sobre su más próximo perseguidor, Lazio de Roma, a siete jornadas del final de la temporada, tendrá el próximo fin de semana la primera ocasión de asegurar matemáticamente el tercer título de campeón de Italia de la historia del club.
El equipo del sur de Italia deberá primero batir a la Salernitana el sábado, en la 32ª jornada, y esperar que la Lazio de Roma no haga lo mismo el domingo en San Siro, en el terreno del Inter de Milán.
El entrenador Luciano Spalletti admitió el domingo que su equipo había dado un gran paso hacia el tercer Scudetto de la historia del club, más de tres décadas después de los dos conquistados en la época de Diego Maradona (1987, 1990). Pero pidió esperar "todavía un poco" antes de "descorchar las botellas" de champán.