El alcalde capitalino, Mario Durán, reveló que la calle de La Amargura, como se le conoce popularmente a la arteria que es muy concurrida en periodo de Semana Santa, por los penitentes que transitan de rodilla a la Iglesia El Calvario, pasará a llamarse oficialmente “Calle de La Amargura”.
Resulta que, según el alcalde de San Salvador, se extrañaron que en los registros oficiales de la municipalidad no se detalla que dicha vía tenga oficialmente ese nombre.
“Se va a llamar calle de La Amargura oficialmente, porque todo mundo la conoce, los periodistas la conocen, todas las personas que transitan la conocen como calle de La Amargura, es más nosotros mismos nos extrañamos al darnos cuenta que no se llama así oficialmente”, señaló el alcalde capitalino al salir de la comisión de Hacienda y de Economía de la Asamblea a explicar sobre la creación de la nueva Autoridad del Centro Histórico.
Es por ello, que Durán informó que presentará al concejo capitalino una propuesta para darle el nombre de Calle de La Amargura oficialmente.
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“A propuesta de este servidor entrará una pieza al concejo municipal que va a hacer que se llame ‘Calle de La Amargura’ de manera oficial y generarle el nombre correcto”, expuso.
Además, adelantó algunas actividades que se realizarán en Semana Santa, por ejemplo, el diseño de una alfombra de 100 metros en el Centro Histórico con colaboración externa.
¿Cómo nace el nombre popular?
La Vía de la Cruz, como también se llama a la calle de la Amargura o del dolor, existe en la mayoría de países, y en San Salvador se ubica en la 6a. Calle Oriente- Poniente.
El historiador Ismael Sermeño dice que formó parte de las primeras ocho vías de la floreciente ciudad de San Salvador, considerándola a mediados del siglo XVI como una de las calles más emblemáticas por su lujosa arquitectura.
Sin embargo, su mayor connotación fue y es de carácter religioso, ya que las 10 cuadras que distan desde lo que fuera la iglesia San Esteban hasta el templo El Calvario, se transforma en el escenario de las diferentes actividades litúrgicas para la conmemoración de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo.
Además de hacer referencia al camino que Jesucristo recorrió hacia el Monte de la Calavera con la cruz a cuestas para ser crucificado, es considerada la calle de la Amargura más larga (formada por mil metros lineales), superando a la famosa Calle de la Amargura de Los Pasos, de la Antigua Guatemala.