El Tribunal Supremo Electoral (TSE) tiene poco tiempo para contratar a una empresa confiable para implementar el voto en el exterior. Esto, según expertos, podría afectar la calidad del proceso electoral de 2024 y encarecerlo. Algunos especialistas advierten que ya no es suficiente el tiempo para hacer las cosas como “deben hacerse”.
El Tribunal tiene hasta junio próximo para adjudicar el servicio del voto electrónico en el extranjero, un proceso inédito en El Salvador y para el que se requiere hacer con antelación muchas pruebas que comprueben que funcionará sin riesgos a vulneraciones.
Esto conforme al artículo 14 de la Ley del Voto en el Exterior que establece que el sistema de votación remota por internet y electrónica presencial deberán estar definidos por el TSE, al menos ocho meses antes de las elecciones. Los comicios para presidente, vicepresidente y diputados de la Asamblea se llevarán a cabo el 4 de febrero de 2024.
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Es decir, la máxima autoridad electoral cuenta con 3 meses para hacer todas las pruebas y reafirmar el funcionamiento de dichas modalidades para ejercer el sufragio.
Ante esto, la experta en derecho electoral, Ruth Eleonora López, señaló que “cada vez es menor el tiempo que tiene el TSE para los procesos de contratación, esto puede afectar la calidad del proceso y lo encarece”. Destacó que a menor tiempo “menos posibilidad de encontrar oferentes serios dispuestos a participar en soluciones informáticas o procesos inéditos”.
El director de Acción Ciudadana, Eduardo Escobar, recordó que el retraso en la aprobación de la ley del voto en el exterior “es la que deriva en este corto tiempo que tiene el TSE para contratar a la empresa”.
Solución tecnológica completada
“El punto será consultar con el TSE si este tiempo lo considera suficiente y adecuado para tener lista en el tiempo que requiera en el calendario electoral a la empresa contratada, así como la solución tecnológica completada y comprobada en materia de seguridad”, apuntó Escobar.
Malcolm Cartagena, experto electoral, recalcó que el TSE siempre presenta con suficiente antelación su presupuesto y ya se sabe en qué año toca elección, “así que el Tribunal no se viera presionado en los tiempos si se lo aprobaran mucho antes o le dieran un anticipo”.
Carlos Araujo, exintegrante de la Junta de Vigilancia Electoral, dice que “si se hace lo que se debe de hacer correctamente, el tiempo que tienen los jueces electorales no será suficiente”. Dijo que es la forma de garantizar una plena identificación del ciudadano que va a votar y que el voto sea íntegro, que nadie lo pueda manipular y secreto.
“Son dos soluciones en las que deben de garantizar esas dos cosas. Ese proceso no lo venden en Amazon, son pocos los proveedores que tengan la suficiente robustez en el mundo, que tienen que adaptarlo al sistema electoral salvadoreño y debe ser probado y certificado por el Tribunal y actores que participarán en la elección”, concluyó.