Dos negocios fueron atracados esta madrugada, aproximadamente a las 2:00 a.m., en el cantón La Parada, sector conocido como Aldea Bolaños, en el municipio de Candelaria de La Frontera, departamento de Santa Ana. Hasta ahí llegaron cuatro sujetos vestidos con ropas similares a la que usan los policías y otro hombre vistiendo indumentaria que lo hacía parecer un fiscal.
De acuerdo con estimaciones que las víctimas dieron a los policías que llegaron a investigar ambos robos, el monto de lo robado asciende a aproximadamente $12 mil dólares, entre dinero en efectivo, joyas y prendas de valor, según fuentes policiales de la Delegación de Santa Ana.
El primer atraco se registró en la calle principal de la colonia Santa Gertrudis, siempre en el sector conocido como Aldea Bolaños. A la vivienda irrumpieron los cinco sujetos, diciéndole al propietario de la vivienda, en la que también funciona un pequeño negocio, que andaban haciendo allanamientos (registros de inmuebles) en búsqueda de armas de fuego.
Los ocupantes de la casa creyeron que en realidad eran policías acompañados de un fiscal; sin embargo, pronto cayeron en la cuenta de que la verdadera intención de los “policías y el fiscal”.
De esa casa se robaron una cantidad de dinero no especificada, joyas y prendas de valor, así como el sistema de almacenamiento de las cámaras de videovigilancia, según los informantes policiales.
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El robo fue cometido en un lapso de 25 minutos. Los delincuentes estaban por retirarse cuando a esa casa llegó un familiar quien ya había sido avisado que policías habían llegado a la casa de su hijo. Los “policías y el fiscal” ordenaron a la persona que se subiera en una camioneta roja y que los llevara hasta su casa, donde también funciona una abarrotería.
Una vez en la casa del padre de la primera víctima, los delincuentes lo obligaron a que les entregara el dinero en efectivo que tenía. Ante las amenazas, esa persona les entregó 9,000 dólares.
Según el relato que las víctimas hicieron a los policías que llegaron a verificar ambos robos, los delincuentes usaron guantes y gorros pasamontañas, así también andaban en una camioneta roja y los supuestos policías andaban emblemas de esa institución en su vestimenta.
Reunión de emergencia
Los robos cometidos por hombres vestidos de policías en el sector de Santa Ana y Ahuachapán no son pocos. Incluso hace un par de meses, en el mismo sector de Aldea Bolaños fueron cometidos otros robos bajo la misma modalidad de los de esta madrugada.
Fuentes policiales aseguran que los mandos policiales no ignoran esa situación, pues los informes de decenas de robos ya han escalado a la cúpula policial, pero hasta el momento no se ha hecho nada.
No obstante, fuentes policiales, han informado que esta mañana se ha desplazado a Santa Ana un equipo para establecer una “mesa de crisis”, para tratar el caso de supuestos policías cometiendo robos incluso, utilizando un vehículo policial.
“Parece que por fin le van a poner interés a ese asunto; ahorita se está desplazando una comisión hacia Santa Ana a hacer una mesa de crisis para ver esos casos”, informó una fuente policial.
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El pasado 25 de agosto, en una cooperativa ubicada en la colonia Médica, de San Salvador, un grupo de delincuentes con uniformes policiales, a bordo de un vehículo particular, irrumpió en un negocio del cual robaron 60 mil dólares en efectivo.
Días después, la policía informó sobre la captura del agente Gustavo Encarnación Lovato Murcia a quien le decomisaron 17,000 dólares en efectivo y la camioneta, de su propiedad, en la que perpetraron el asalto el 25 de agosto, según informó la institución policial.
El pasado 24 de septiembre, dos agentes de la Sección Táctica Operativa (STO) fueron capturados tras ser denunciados por una persona a quien le habían robado 106 dólares con todo y billetera.
El atraco fue cometido por los dos policías, según la denuncia, mientras patrullaban el sector de la calle 5 de Noviembre, de San Salvador, con su respectivo uniforme y a bordo de un auto con distintivos policiales.
Al ser registrados por policías de Asuntos Internos, les encontraron la billetera y el dinero robado; además, les hallaron varias porciones de marihuana y de crack, es decir, cocaína en piedra.