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¡Así dan ganas de servir!

Cumplimos veinte años sirviendo calladamente a nuestro pueblo, invirtiendo en los beneficiados el 100% de lo donado, gracias a las bendiciones de Dios, la confianza de nuestros asociados y la generosa voluntad y pleno servicio de todos los SONSONATECOS DE CORAZÓN

Por José Ernesto Urbina Barrientos | May 07, 2023 - 15:29

Marzo de 2003… el instinto gregario, las reminiscencias estudiantiles, la vieja amistad y la nostalgia del pueblo nos reunió en un restaurante para desayunar, gracias a Dios, después de una vida de realizaciones de estudio y trabajo. Fue un verdadero placer reencontrarnos; algunos, activos, otros, retirados; las canas, las libritas de más o, menos. Decenas de años, sonsonatecos todos, caracterizados por nuestra actitud juvenil. Iniciamos reuniones quincenales, rotando lugares… compartíamos amistosamente, bromas, anécdotas, experiencias, con el gusto y el deseo de volver a la siguiente junta… En una ocasión alguien sugirió que aportáramos algunos “pesos” por reunión y tener recursos para “algo que se nos ocurriera”. Un compañero contador de experiencia, honestidad y prestigio se ofreció voluntariamente para manejar el dinero. Invitamos a otros y nadie sugería “ONG” o estructuras, ¡mucho menos “cargos”!
¡De cinco pasamos a diez! El tiempo transcurría, y el grupo y el fondo se fortalecían.


Un día, “el encargado de la colecta” comunicó que había una cantidad modesta, pero significativa. ¿Qué hacer, entonces, con esos dólares? Vino a cuento, el grupo de coterráneos entusiastas, con personería jurídica, que participaron en la vida social del pueblo y ayudaron humanitariamente; cosecharon muchos éxitos, pero se extinguió. (algunos miembros todavía se reunían a título personal).

De este antecedente surge la iniciativa de “formalizar el grupo”, utilizando la infraestructura legal de los paisanos; pero ante las complejidades legales, logísticas, administrativas y financieras que conlleva, se descartó; sin embargo, la disciplina del grupo, el entusiasmo, la amistad, la voluntad de servir, aportar recursos y esfuerzos personales y la creatividad, estaban intactos y dispuestos. ¡Y manos a la obra! Con informes de necesidades de los adultos mayores del Asilo San Vicente de Paúl, de San Antonio del Monte, y en nuestros vehículos, entregamos el primer donativo, y seguimos con el Asilo de Sonsonate, y atendimos temporalmente el “Hogar Tanchito de Figueroa”. Todas las visitas fueron cordiales con beneficiarios y dirigentes.


Los estimados amigos del grupo anterior, gentilmente decidieron sumarse, y así constituimos los desayunos mensuales de SONSONATECOS DE CORAZÓN en el Círculo Deportivo Internacional, bajo el lema “Uniendo amistades para satisfacer necesidades”, un colectivo “formalmente informal”.

Continuamos sirviendo a los adultos mayores de los Asilos Paulinos de Juayúa y de Izalco; Asilos “San Pedro Claver”, de Armenia, y “Judá”, en el cantón Los Arenales, de Nahuizalco. La asistencia bimensual, modesta, dadas las grandes necesidades de los beneficiarios, es en especie o en efectivo, previa cotización, consiste en víveres, artículos de limpieza, medicinas. Ocasionalmente, por solicitud razonada, se atienden casos especiales, infraestructura o adquisición de muebles y equipos. Según disponibilidad de recursos.


Las noticias de la obra se esparcieron. Providencialmente nos encontramos con Braulio Trigueros, viejo amigo, profesional, compañero, residente en Estados Unidos, quien, al conocer la obra, la hizo suya y con singular esfuerzo, interesó a otros hermanos mediante campañas de donación trimestral que mantiene, siendo éste un valioso y generoso recurso. Adicionalmente, en Sonsonate, nuestro entusiasta servidor Juan Carlos Beltrán, con amigos colaboradores, organizan y realizan mensualmente en un restaurante, los “Desayunos de Sonsonatecos de Corazón”.
El colectivo “formalmente informal” tiene un Grupo Gestor que administra, ayudado por la Sabiduría Divina; toma decisiones consensuadas y dirige y controla transparentemente, las operaciones. Mantiene comunicación e informa documentadamente las donaciones y comprueba in situ su inversión.


Cumplimos veinte años sirviendo calladamente a nuestro pueblo, invirtiendo en los beneficiados el 100% de lo donado, gracias a las bendiciones de Dios, la confianza de nuestros asociados y la generosa voluntad y pleno servicio de todos los SONSONATECOS DE CORAZÓN, ¡sin esperar nada a cambio! Por eso digo: ¡ASÍ DAN GANAS DE SERVIR!

Educador/joserne1@outlook.com

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