La diferencia entre ambos era que Kania estaba desnudo —mitad hombre, mitad esfinge. “Lo has perdido todo, hasta el pelambre —se burló la quimera. Venías desnudo al nacer, y mueres desnudo al final. Tan poco te dejó la vida. Eres uno más que pasa por los senderos de arena, desnudo de riquezas, desnudo del ayer, con frío. No creo que a fin de vengar tu vanidad quieras matarme a causa de tener tu mismo rostro y tu misma soledad.” “Hace tiempo que los seres que más amé se cruzaron por aquí y tú los aniquilaste al no poder ellos responder tus enigmas fatales, implacable criatura del infierno. Amigos, parientes y personas amadas perecieron ante ti, contadora de sueños. Es tiempo de mi venganza...“ “Eres tan solo un hombre con una burda máscara de esfinge. O lo que es lo mismo una desdichada esfinge con máscara de hombre. Has usado tantas máscaras, que ya no sabes quién eres. Criatura perversa de lejanas ciudades, ésta es la última careta con que cubrirás tu rostro. No tienes más venganza por saldar. Esta será tu muerte final, tu última desdichada victoria. Por ello te formularé el único acertijo que guardo para ti, hombre del último rostro.” “Dilo cuanto antes, divina aparición.” (V) <de “La Esfinge Desnuda” -C.B.>
Kania: mitad hombre, mitad quimera
.
Por Carlos Balaguer | Ago 17, 2022 - 18:39