Espíritus viajeros del tiempo infinito, Indra y Karuna cruzamos las diversas edades del planeta Akala. Vimos -al través de largos siglos cuánticos- cómo el fuego de los cielos cayó en meteoros sobre aquel imaginario mundo del Cosmos. Luego vinieron invernales edades de hielo, cataclismos y tempestades solares que acabaron con diversas formas de la vida natural. Después de estos episodios de destrucción sobrevendrían las nuevas creaciones de la “baja entropía” y el renacer de mundos nuevos en aquel continente sin tiempo. Tristemente el paraíso del “Tercer Cielo” volvió a quedar atrás, sobreviniendo humanidades inmersas en el “moham”, el divino olvido. Surgieron las eras del hierro, del cobre, del oro y de las guerras. Hasta entonces nos dimos cuenta que habíamos vuelto al futuro del tiempo profundo. ¡El planeta que encontramos en la expedición había sido el mismo del cual habíamos huido! Queriendo escapar de sí misma la Humanidad advirtió que su imposible éxodo a las estrellas había sido nada más que otro imposible espejismo. La nave ultra lumínica “Ícaro” nunca pudo encontrar el nuevo mundo de su triste Utopía”. (LII)
Volviendo al futuro de “Akala”
Por Carlos Balaguer | May 11, 2022 - 16:40