Algunos de los emigrantes estelares habíamos decidido quedarnos en aquel planeta desconocido y reescribir nuestro destino a fin de vivir otro sueño divino. Muchos no tendríamos motivos de volver a nuestro planeta azul, dudosos de haber dejado allá la felicidad. Nuestra especie no había llegado al culmen de su evolución. Su desarrollo había sido tecnológico más que espiritual. Por ello habría decidido acabar con el planeta e inmolarse en la última guerra del holocausto nuclear. La civilización suicida enajenó, distorsionando su visión de la vida, de sí misma y de la divinidad. Por ello perdieron su único Paraíso, al dejarlo de ver. De quedar para siempre en aquel remoto planeta tendríamos la oportunidad de crear un nuevo mundo y venerar la vida de una manera diferente y sagrada. Nuestros himnos de paz y de amor llenarían de luz las profundidades del éter. Fundando un nuevo paraíso en otro Génesis, seríamos los pioneros de una nueva Humanidad, dentro de una renovada creación divina. Nuestros descendientes nos recordarían como los primeros seres de esa otra Creación, heredándoles lo poco o mucho de nuestro humano conocimiento. (V) <“Éxodo del Sapiens Estelar al Universo” C.Balaguer-Amazon)>
Viviendo otro sueño divino
Por Carlos Balaguer | Feb 24, 2022 - 17:35