La doble moral de las modernas guerras económicas condena y prohíbe el sufrimiento y la muerte “a fuego lento” que provocan las armas químicas en las víctimas de guerra de cruentos conflictos civiles. Entre tanto, miles y miles de inocentes caen víctimas de una muerte rápida, considerada al parecer más “humana” por ser instantánea. Como en los mataderos de reses, donde matan al vacuno con el golpe de un mazo en el cráneo para que éste no sufra por más tiempo. Las masacres mundiales de una falsa y mal llamada guerra “fría” entre las diferentes potencias de la Tierra, acontecen ante los ojos del mundo, mediante la actual comunicación global escrita o satelital. Ya no podemos esconder nuestro crimen y refugiarnos en las frondas de un perdido Paraíso. Cuando el Padre nos pregunte: ¿Por qué te escondes Caín del Siglo XXI? y no podamos responder a nuestra desobediencia divina, ni esconder el mismo dolor de nuestro crimen y desnudez. Entonces diremos: “Me escondo porque estoy desnudo Padre: porque tú me creaste desnudo. Nací y moriré sin riquezas, ya que éstas quedarán en la tierra de Nod, (heredad del fugitivo). Hasta el amor humano -que es amarte a Ti- he perdido Dios. Sólo amo el Oro y la Guerra. Mi sed me lleva al abrevadero de la muerte y el fratricidio”.
Moderno Caín de las armas químicas
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Por Carlos Balaguer | Feb 19, 2023 - 15:19