Bien dicen que el ejemplo comienza en casa. Y el portero mexicano Joel "Pituca" Almeida así lo demostró el sábado por la noche, tras el juego entre Santa Tecla y CD FAS que terminó en empate (0-0).
Luego de que se cerrara hasta la etapa de declaraciones de los jugadores, en una especie de zona mixta en la cancha, el guardameta no perdió el tiempo y se puso a limpiar. Recogió la basura y dejó limpio el espacio que ocupó el equipo.
"La esperanza muere al último": portero "Pituca" Almeida
Almeida, quien fue clave en el empate y se llevó algunas críticas por "hacer tiempo" al final del juego, en el que incluso de llevó la amonestación (amarilla), no dudó en limpiar a prisa la zona del banquillo donde estuvieron los compañeros. Retiró las bolsas y los desperdicios que dejó el plantel ahí y en los alrededores inmediatos de la cancha.
En su mayoría, fueron bolsas de agua las que el azteca fue retirando. Previamente, se hizo de una caja para ir depositando dentro los desperdicios. Con todo y sus guantes, "el Pituca", quien ya era el último de los periquitos en la cancha, fue levantando una a una la basura a lo largo del banquillo, en el suelo, por debajo, hasta que se llenó la especie de basurero que se montó en su mano.
Una vez completa, no paró. Y continuó poniendo todos los desperdicios que encontró por ese sector. Incluso, los de ese lado de frente al banco, en la gramilla, que estaban mal puestos. Almeida dejó de este modo limpio y dio el ejemplo como futbolista de que se debe ser profesional en todo y ante todo. Demostró ese espíritu de servicio y de calidad como ser humano, al fútbol nacional.
Después de limpiar todo, y de una iniciativa que seguramente la debe tener siempre, en los partidos y quizás hasta en los entrenamientos, Almeida se retiró. Dejó limpio todo. Aseó y con este pequeño detalle hizo la diferencia como persona y jugador, en beneficio de toda una institución y del deporte.
MIRÁ PARTE DE LA RECOGIDA DE BASURA DE ALMEIDA: