El partido entre el Burdeos y el Rodez, decisivo para el ascenso de los primeros y la permanencia de los segundos, fue suspendido después de que un hincha bordelés agrediese a un jugador rival que acababa de marcar, dejando en el aire el regreso del Girondins a la élite.
En el minuto 23, el centrocampista visitante Lucas Buades marcó el tanto que significaba el 1-0 y al celebrarlo fue agredido por un hincha rival que saltó al terreno de juego.
"Los elementos son probatorios, el jugador no puede reanudar el encuentro porque está conmocionado. Hemos respetado el reglamento y el partido no se reanudará", explicó el árbitro del encuentro en conferencia de prensa.
"No se encontraba bien en el vestuario y ha sido trasladado al hospital", agregó después el entrenador del Rodez Didier Santini.
La liga francesa anunció que se reunirá de urgencia el lunes para examinar los hechos e imponer eventuales sanciones.
Por otro lado, el que sí confirmó su ascenso a la Ligue 1 fue Le Havre al ganar 1-0 al Dijon, regresando a la élite del fútbol francés tras 14 años de ausencia.